sábado, 14 de agosto de 2010

SILVIA MONTENEGRO
 



Amputé el lado que más hiere.
Cenizas al mar
                 no sé
desvarío
lo arrojé sin pensar.
 
Qué hago ahora con este vacío
con estos dioses escondidos
que me desclavan
de tu sombra.
 
Tu sombra es un éxtasis que va de flor en flor.
El deseo es más que un cuerpo.
Provoca.
 
Resucita lo que aniquilo.
 
Es la confirmación de la vida después de la vida.
 
Traiciona.
 
Sobrevivo en la sensación de estar yéndome entera.
 
Quisiera
 
pero no debo.
 
Dicen que nací para celebrar costumbres.
 
******
 
Cada cristal me duele.
 
Me arden las sillas
               los cuadros
el alcanfor
la luna
sirio y camnopus.
Los pájaros  los sábados.
Júpiter y el estómago.
 
Todo de borde a borde me arde.
 
Es lo que está cuando no estás.
 
Tus hilos blancos
tu canto último
es lo que habito.
 
Todo  lo demás
 
una pena de amor infinita.
 
   de " el diablo pide más"
 
     corresponsal Susana Zazzetti.

1 comentario:

  1. Muy buenos poemas, pero aquí debo quedarme un rato más. Cada palabra detiene por su fuerza y su sentido. La belleza se hace después cuando las palabras todas se juntan.
    Felicitaciones
    Abrazo
    María

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