viernes, 31 de agosto de 2012

martes, 21 de agosto de 2012

NOTICIAS FRESCAS

PARA TODOS LOS QUE NOS ALENTARON VA ESTA NOTICIA

ANDRES PASO LA OPERACION CON EXITO. AUN ESTA EN TERAPIA INTENSIVA.

ESPEREMOS QUE TODO SIGA Y BIEN Y PRONTO EL MISMO PUEDA ESCRIBIR,

UN GRAN ABRAZO

sábado, 18 de agosto de 2012

Operación de Andrés

A TODOS LOS AMIGOS, COMPAÑEROS. COLABORADORES: ESTOY INTERNADO EN EL HOSPITAL DE HAIFA, EL PRÓXIMO MARTES 21 DE AGOSTO MI CORAZÓN PASARÁ UN AJUSTE TOTAL. TARDAREMOS UNOS CUANTOS DÍAS EN RECUPERARNOS ... Y LA REVISTA QUE NUNCA DORMÍA SE TOMA UNOS DÍAS DE VACACIONES. AMIGOS, CRUCEN LOS DEDOS ENVÍENME LA POTENTE ENERGÍA DE LOS ESCRIBIDORES DE BUENA ONDA.

HASTA EL REGRESO, AMIGOS Y COMPAÑEROS!!!

sábado, 11 de agosto de 2012

Ernesto Ramírez


Aldao  (izq,) Ramírez (der.)

impurezas urbanas

IX

se excita el charco
la piel transparente se le deforma
se encrespa y muta
acribillada sin piedad 
por los mismos picotones
que aumentan su carne líquida,
crece el charco  
inexorable se extiende
cobra adultez y abarca más
más acera, más calle, más ciudad
alimentado a materia madre
se hace mar diagramado
humectada sabana donde cunde
presuroso y masificado
el hormiguero 
y sus frenéticas soledades mundanas,
es llanto el charco
rastrera lágrima gris
de ese cielo sin consuelo
ignorado por el trajín compulsivo
del rebaño urbano
que insaciable
e insensible 
        -todo ímpetu, todo codicia-
no tiene tiempo para disfrutar
siquiera
de una tarde de lluvia.


XI

hay tardes en la ciudad
que tardan demasiado en arrastrar el día
y el día henchido de tiempo pesa
su peso lastra la vida
arrinconándola por los bares
en alguna mesa apartada
donde se diluya algo
el vocingleo erudito del animal
-erectus depredador genuflexo-
que lo invade todo con su ser transgénico
sus alter egos tecnológicos
y las obcecadas urgencias dictadas por el ombligo,
de ese sujeto de verdades absolutas
feroz condenador 
sólo absolutorio de sí mismo.
entonces la tarde resuelve lavar el día
antes de hacerlo pretérito
quitarle las impurezas de ciudad adheridas a las horas
con el agua mansa de una llovizna
pronto la acera se cubre de murciélagos
sobrevolando las cabezas
y la noche se trepa a los cristales lacrimosos
mientras el alcohol amortigua el pecho
y el humo enturbia soledades
y los que nada tienen
con desazón observan
la estrepitosa absurda prisa
de aquellos
que todo lo quieren.


XIII

la lluvia ha cesado
replegó su artillería de agujas líquidas
y nuevamente en la avenida
sobre las aceras asaltadas de inquietud
ocupa su puesto de combate
una avanzada de gladiadores del infortunio
de manos cóncavas o pequeñas vasijas hambrientas,
junto a la iglesia uno sobresale
canijo joroba reluciente y pierna y media
hace cuestión en exhibir
la rótula trunca y la giba roma
su vasija está mojada aunque seca
su suerte de cuerpo libre, su alma presa
su descaro aumenta la prisa de los transeúntes
distraídamente les acelera
sólo uno que otro le observa
sólo uno de muchos deposita su placebo ambivalente,
desde lo alto el campanario vocifera otra hora
siglo tras siglo
su vos de bronce sostiene
la cruz sorda y vacía.


XV

al cruzar la calle
se me acercó
andaba como una modelo anoréxica
paso cambiado
y la alegría al ras de su abandono
marchita entre los muslos
y sus ojos
secos de hacerlo
pedían
y no entendía que secos
andamos en la ciudad de lo que le urgía
no fui la excepción
como el resto llevaba prisa
le ordené alejarse
aun así sentí que seguía mirándome
incluso después de la frenada
y el golpe seco
tan seco
como los pistones
que bombean tanta prisa.

andrés aldao



OLGA la GALLEGUITA

  
Olga, Galleguita…
“…durante una fracción de segundo su cabeza
alcanza la dulce ingravidez, giró lentamente y
sus ojos recogieron por última vez la engañosa luz de
las estrellas, la última promesa loca de la vida.”
                                                          Juan Marsé-La oscura historia de la prima Montse


Y aunque te conmovían los tangos,
tu cara fresca me conmovía a mi…y eso me bastaba.
Cometiste el pecado de ser Olga, la Galleguita,
y tu frescura caía sobre mis sueños empapándolos de ilusiones.
Te decía con lasciva angustia que tu pubis
era como un cuadro del renacimiento; y que tus piernas,
pálidas y largas, eran como una llamada de amor indio.
Vos con disgusto me crucificabas:
Andá a joder a otras con esas comparaciones tontas,
y al decirlo recogías tu cabello revuelto por la brisa
Meneabas ese garbo traído de las muñeiras de Galicia,
donde tus viejos se rompieron el lomo gallego.
Y yo disfrutaba tu pantalón ajustado…
Eras un ángel distraído que llegaste a la calle de baldosas sueltas,
quebradas a tu paso taconeando,
en la que gorriones impetuosos se columpiaban
entre esos paraísos que se llevó el tiempo,
arrugados…exhaustos por inviernos tétricos...lúgubres.
Tengo en la retina tus ojos color difuso-almendras,
parpadeando con esa candidez deliberada
que regocijaba mi corazón.
Eras como un fresco pintado sobre una pared de barrio
por un artista muerto de pena y de amor…
Sos un adulador embustero, me decías,
sacudiéndome aquel dedo ten delgado, tan blanco
que yo llamaba aguja de colchonero.
Y entonces te hacías la rata yéndote por largos días,
tan largos y tan tristes me parecían,
que había decidido voltearme y dejarme morir.
Luego, siempre, volvías liada
entre un montón de sonámbulos
sacándome la lengua…
como relamiendo una costra de chocolate.
Reaparecías como un trasgo
envuelta en la niebla que trepaba del Riachuelo,
y yo suspirando,marmota, imberbe
aplanado por una ristra de emociones virginales.
A veces te imaginaba taconeando
como una andaluza metida en esos timbos bochincheros,
mientras tus piernas largas y pálidas llamada de amor indio
se deslizaban entre las burbujas de la tardecita de fantasías y
espejismos,
como para tomar el mate con rosquitas..
o una taza de café renegrido con biscochitos de grasa.
Y a veces pensándote en la cama
arrullados los dos entre las sábanas,
los sexos buscándose con premura e inocencia
para gemir entre vaivenes agónicos y vulnerables de placer.
Veía a esos tipos desgarbados, Galleguita,
que con estulticia despareja te desnudaban sin bochorno
con miradas concupiscentes…húmedas de deseo.
Y me angustié el día que
sentada en la fonda de la calle Río Bamba
susurraste: me voy Qué qué? que me voy
y no pongas cara de cristo apuñaleado
o de Che Guevara sobre el mármol sucio y frío,
que me voy…
No supe de vos hasta que encontraron
tus piernas largas y pálidas llamada de amor indio,
tu cara fresca y el pubis como un cuadro del renacimiento,
tumbados en ese basural del Docke,
la sangre marchita y negra,
como el alma del violador que te punzó tu garganta,
tan suave, tan bella, tan Olga, Galleguita
Tus ojos color difuso rociados por aquellos lagrimones
que resbalaban con pena, porque vos,
Olga, Galleguita,
fuiste con tus pájaros
a saltar de rama en rama
entre los paraísos de la barriada.
El fresco pintado sobre una pared de barrio
por un artista muerto de amor y pena,
yace consternado entre velas de colores y lágrimas de yeso.
Ahora ya no te escucho, pucha,
decirme con aquella voz de sonsa:
Sos un adulador, embustero
sacudiéndome aquel dedo tan delgado, tan blanco
que llamaba, entonces, aguja de colchonero.
Y yo que quiero dejarme morir, Galleguita
porque acuchillaron a tu inocencia y a la mía la murieron.

© Andrés Aldao

Mercedes Sáenz




POEMA DE MIRARTE

El vino busca en la boca inclinada
un beso de vidrio
color ébano.
no recuerda el verso
confunde las lunas
los pies no alcanzan la rueca.
la ira no es ya
tormenta brutal
queriendo verse cómo el hombre
que –yo- sigo viendo.
un estilete cortés marcó los
hilos en el tapiz de su cara
dibujó su tierra en dónde palidecen
sus dioses oscuros en una blancura
desmedida.
Será su último día.
No existirá mañana.
Y yo lo miro…
tiemblo, también en mi copa
-creo que quiso mirar allí sus propios latidos-


me pidió que no lo toque
hasta que la muerte lo toque primero.

Mercedes Sáenz

JÜRI TALVET



 nació el 17 de diciembre de 1945 en Pärnu (Estonia). Licenciado por la Universidad de Tartu en Filología Inglesa (1972) y Doctor en Literaturas Occidentales por la Universidad de Leningrado (San Petersburgo) en 1981 con una tesis sobre la novela picaresca española del Siglo de Oro, ha impartido cursos de historia de la literatura occidental en la Universidad de Tartu desde 1974 (desde 1992, es Catedrático de dicha especialidad). Ha sido también el fundador de los Estudios Hispánicos en su universidad (en el curso 1992-1993), que continúa dirigiendo. Desde 1994 preside la Asociación Estonia de Literatura Comparada y desde 1996 es director del anuario internacional de la misma Asociación, Interlitteraria. Ha traducido al estonio numerosas obras de las literaturas hispánicas  (el Lazarillo de Tormes, poemas de Quevedo,  el Oráculo manual de Gracián, La vida es sueño y El gran teatro del mundo de Calderón, El burlador de Sevilla y convidado de piedra de Tirso de Molina,  Los cachorros, de M.Vargas Llosa, los cuentos de G. García Márquez, poemas de S. Espriu, etc.). Como investigador y crítico, ha publicadoHispaania vaim (1995), Tõrjumatu äär (2005), así como más de cien  ensayos y artículos sobre literatura y cultura en revistas de Estonia, Rusia, España y Estados Unidos. Ha sido galardonado con el Premio Anual de la Literatura Estonia (1986), el premio Juhan Liiv de Poesía (1997) y el premio Memorial Ivar Ivask, de poesía y ensayo (2002).
 Obras. Poesía: Äratused (‘Despertares’, 1981), Ambur ja karje (‘El sagitario y el grito’, 1986), Hinge kulg ja kliima üllatused (‘El progreso del alma y sorpresas climáticas’, 1990), Eesti eleegia ja teisi luuletusi (‘Elegía estonia y otros poemas’, 1997), Kas sul viinamarju ka on? (‘¿También tienes uvas?’, 2001), Unest, lumest (‘Del sueño, de la nieve’, 2005), Silmad peksavad une seinu (‘Ojos golpean las paredes del sueño’, 2008); Elegía estonia y otros poemas (Valencia, 2002, selección de sus poemas traducidos al español por A. Lázaro-Tinaut), Estonian Elegy. Selected Poems(Toronto, 2008, selección de sus poemas en inglés, trad. H. L. Hix). Ensayos: Teekond Hispaaniasse (‘Un viaje a España’, 1985),Hispaaniast Ameerikasse (‘De España a América’, 1992), Hispaania vaim (‘El espíritu español’, 1995), Ameerika märkmed ehk Kaemusi Eestist (‘Apuntes americanos y contemplaciones de Estonia’, 2000),Sümbiootiline kultuur (‘La cultura simbiótica’, 2005), Tõrjumatu äär(‘El borde irrefutable’, 2005); A Call for Cultural Symbiosis (Toronto, 2005, trad. H. L.Hix).

Recuerdos de Leiden

Meditación en un país bajo
¿Era de verdad necesario llegar hasta el agua
del canal quedo y mecedor de Herengracht
para saber que todos los holandeses son lonchas
cortadas de ese queso que se suele llamar holandés?
¿Tenía que extraviarme de nuevo (esto no fue,
pues, un error), perderte a ti, yacer en un sueño
sin sueño como un cuerpo muerto, dócil,
para reconocerte y amarte de nuevo?  
Ayer oí: 
women’s language is a simultaneous
translation between the language
and the body
Oh, ¿quién les mintió?, ¿quién inventó
esta horrenda patraña?
Esos panes de queso holandés no pasarían raudos
en bicicleta, como ráfagas súbitas y mudas de viento,
aunque fueran panes auténticos hechos de centeno,
y mi cuerpo sería desde hace mucho tiempo tierra negra y obediente,
rendida a los pies de cualquiera, y yo nunca habría escrito
este poema si la traducción simultánea de la que usted habla,
sesuda doctora, se hiciera, como dice,
del cuerpo a la lengua, de la lengua al cuerpo, del cuerpo a la lengua,
o vertiendo lo mismo a una lengua más simple, la de un país bajo,
próximo a la tierra:
del cuerpo al cuerpo del cuerpo al cuerpo del cuerpo al cuerpo

¿También tienes uvas?  

En la madraza de la ciudad que huele a morería, 
bajo arabescos que se recortan y se retuercen,
los críticos académicos explican la revelación:
fluyen las significaciones como la vida misma,
el lenguaje sirve para llegar a acuerdos sin impedir
que cada cual mantenga su criterio; es la que sirvió 
para que un anciano enfermo que perdió una pierna, 
con el rostro cruzado de cicatrices siberianas, tras 
los barrotes, bajo el cielo de su patria, desde la penumbra 
de su gargantuesca máscara, pudiera 
confundir las mentes de los papagayos de París.
Y así quedaron los críticos, intercambiándose alabanzas
y dándose palmaditas en la espalda, pero con sus puñales
andaluces prestos en el bolsillo. Me fui.
No porque yo fuera mejor ni más sabio que los otros.
Ya había pasado otras veces por lo mismo.
En el principio de los siglos, aun antes de que
naciera aquel que recomendara ofrecer la otra mejilla,
el sabio cobijado bajo el tejado de la pagoda
había sentenciado: “Todo fluye. Nada podrá
contra ello la espada ni la palabra”.
Lo supe de otro modo. Lo intuí
cuando una mujer joven, con su mirada
tierna trenzada en la corcova, se inclinó 
ayer sobre sus hijos sanos, concebidos
con su marido jorobado; y hoy lo intuyo
a través de la vocecita tenue de mi hija 
de dos años que me ha preguntado por teléfono: 
“¿También tienes uvas?”.
Sin saber qué hay más allá de los países y los mares,
sin saber que hay diferencia entre un día y un año,
mas que en realidad no hay diferencia alguna.

SANTA MARÍA Daniel Gorosito Páerez



                                                    “Por eso fabriqué Santa María
                                                      fruto de la nostalgia de mi ciudad”.
                                                                              Juan Carlos Onetti

Ficción dentro de la ficción.

Un sauce se arquea
para beber en el río de aguas café.

Santa María,
inmune al desgaste
de las horas y los elementos.

Santa María,
inventario del olvido
a lo largo de la costa.

Santa María,
intrincado mundo interior
cubierto de tinieblas
blanquicientas como espuma

Santa María,
mirada fija y circular
el cuerpo ante un espejo
reflejando vergüenzas
e infamias olvidadas
que son gotas de vida.

Santa María,
el silencio sobrevive a las palabras,
la muerte de la noche te hace dormir
adiós al insomnio.

Riachuelos de estrellas
caen sobre el astillero
y el “Dios Brausen”
desde su ventana ve difuminarse la ciudad.

Daniel Gorosito Páerez 


Amelia Arellano



 

VERDADES REVELADAS (Haití, enero de 2010)

“Cuando se miran de frente, los vertiginosos ojos claros de la muerte,
se dicen las verdades,  las bárbaras, terribles , amorosas crueldades...”

Gabriel Celaya

 En la Escuela de mi pueblo me enseñaron muchas cosas.
Los 10 mandamientos por ejemplo.
El  5º, el 2º y el 4º no se hacen.
El 3º ni el 7º, no se dicen.
El  1º, el 2º, el 6º, ni el 8º, no se no se preguntan.
El 9º y el 10º pueden hacerse pero no se dicen.

No se hace, no se dice, no se pregunta, no, no.
Dogmas de la fe, decían.
Aprendí que la gente cuando se muere se la entierra.
Se coloca en su tumba su nombre y apellido.
Se la invoca,  se le reza.

Me enseñaron que había una vez…
Que América era un crisol de razas.
Que había un país de plata, argenta. (¿Plata robada?)
Que Haití es un paraíso Terrenal.
Que hay guayabas, frutos del pan, mangos, muchos mangos.
(El mango es una fruta, aclaro)
Que hay flamencos, pelícanos y garcetas.
(Que los flamencos tienen las patas rojas, por mentir)
Que Clinton y Bush (1912) ayudan a reactivar el turismo.

Con la adultez a cuestas, aprendí.
Que hay blancos que son negros y negros que son blancos.
Que en Haití  una lengua oficial es  la castilla.
Que en criollo se le llama Repiblik Dayti.
Que el patrón vive en  el norte del Norte.
Que hay más negros que blancos.
Que la esperanza de vida es de 40 años.
Que hay más pobres que ricos.
Que de mil niños mueren 120.

Aprendí de las guerras.
Ley de migración 1936: hacer desaparecer negros.
(¿Aun hay judíos, negros y comunistas?)
Aprendí, que algunas, figuran en los anales de la Historia.
Otras, las mas pequeñas, no registran nombre, ni apellido.
Que hay hombres que sólo son un número.
Un número más, un número menos.
Más por menos, siempre da más.


Aprendí “que hoy he mirado los ojos claros de la muerte”
Y he repetido, sollozante, la verdad revelada por un cholo peruano.
“¿Con que valor voy a hablar de psicoanálisis?”

La luna esa noche,  se desangró en lágrimas negras.
Por eso , luce más pálida que nunca.


Ofelia Funes



noche

Rémora de lilas y nomeolvides en la frente
un relicario entre los pechos
 el cielo  montado en golondrinas

noche cerrada a plena luz
bajo la plata bruñida donde se baña la luna
el mar devuelve al río
  peces muertos para sembrar su lecho,
despojos que me preceden,
cúmulos de escoria, nicho de reyes
que  la marea arrastra para alimentar al cuervo

y la mujer que pasa con un pan bajo el brazo
 lava sus pies y  pregunta
cuál es el lugar dónde descansa el águila.


ESPOSA  DEL  VIENTO

Palpando las orillas atraviesa el río
hunde los pies en el barro
danza en la levedad de la piedra.

Libre como los pájaros del campo
abre la soledad 
y  dice arrullos de paloma blanca.

Busca los ojos del amado
cuando el clamor del hornero llama a la hembra a refugio,
cuando el resplandor agobia
 y el pensamiento cae   en la intimidad de la lluvia