jueves, 12 de agosto de 2010

ALEJANDRO SCHMIDT
 

      


          En un puño oscuro
 
sobre un desierto ardiente
así
quise vivir
 
hubo rosas en mi fin del mundo
y en un puño oscuro
la más bella luz
 
en la silla del odio me senté
en el rincón helado
con el completo corazón
quemado en sus asombros
 
una y otra vez
fueron a su estrella las palabras
llevaban
mi última fortuna
 
sin embargo
la ceniza del cielo perfumado
unía
mi corazón al fervor
 
como un puño que
guarda su alimento
en pobres bolsillos
en noches tormentosas
 
pude vivir
pude vivir.
 
      de " En un puño oscuro"
 
    corresponsal Susana Zazzetti

4 comentarios:

  1. Ayer estuve por sus hojas. Toda mi admiración encontrarlo por aquí. Un placer leerlo.
    Abrazo
    María

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  2. Cuando María dice por sus hojas y para quienes no sepan, supongo que se refiere a Alguien Llama, carpetas de poesía donde Alejandro hizo un excelente trabajo para difundir a poetas argentinos.Y en cuanto a este poema, de su libro "En un puño oscuro" me deja con ganas de más, Alejandro es un poeta que provoca sed.
    Un abrazo.

    Lily Chavez

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  3. EXCELENTE POETA, EXCELENTE POESÍA. Y EL GUSTO DE QUE SIEMPRE ANDE POR AQUÍ.
    UN ABRAZO ALEJANDRO.

    EDGAR BUSTOS

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  4. Conmovedor poema, gracias por compartirlo, a Susana y a la revista ! Abrazos. Fabiana León

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