MARZO 2011 – Andrés Aldao
Como una bandada atrabiliaria de pájaros negros y feroces, los militares de la Argentina pusieron en marcha el plan de exterminio de los argentinos que no aceptaban el poder de López Rega y sus adláteres. Escritores, poetas, periodistas, humoristas, artistas, obreros, sindicalistas, políticos de izquierda, amas de casa, estudiantes secundarios, dentistas, médicos, psicólogos y un largo etcétera, hasta redondear los treinta mil desaparecidos, torturados hasta la muerte, despellejados, las mujeres violadas incluso las embarazadas, y sus bebés dados en custodia a familias vinculadas a los responsables del proceso...
Desde marzo de 1976 se desató el vendaval represivo, continuidad de los crímenes de la Triple A a cuyos autores no se los procesó ni condenó. Marzo, el 24, ha quedado como el día y el mes de la memoria. Se trata de una fecha simbólica, porque los crímenes y los desaparecidos no comenzaron exactamente en 1976, en marzo, el día 24... Desde el acto en Ezeiza, el día del regreso de Perón, con Osinde y la Kennedy , la guardia de hierro y el CNU, se agudizó la preparación y ejecución del plan de exterminio que tuvo su antecedente inmediato el 22 de agosto de 1972 en la cárcel de Rawson...
Con la esperanza de encerrar, enjuiciar y condenar a los criminales sobrevivientes de los crímenes de lesa humanidad, dedicaremos parte de las Artesanías Literarias de marzo a incluir obras que traten de la represión, el mes de Los Idus de Marzo...:
“César, guárdate de los idus de marzo”. En el camino al Senado César se encontró con el adivino Espurina que le había dicho que se guardara de los idus de marzo y le dijo:
- ¡Ya han llegado los idus de marzo y sigo vivo!
- Sí, pero aún no han acabado. – contestó el adivino (...) Los asesinos se abalanzaron sobre César asestándole 23 puñaladas. César aún tuvo fuerzas para empujarles, para pronunciar las palabras de incredulidad al ver a Bruto con un puñal en la mano (“tu quoque Brute fili mi! —Tú también, Bruto, hijo mio?).
- ¡Ya han llegado los idus de marzo y sigo vivo!
- Sí, pero aún no han acabado. – contestó el adivino (...) Los asesinos se abalanzaron sobre César asestándole 23 puñaladas. César aún tuvo fuerzas para empujarles, para pronunciar las palabras de incredulidad al ver a Bruto con un puñal en la mano (“tu quoque Brute fili mi! —Tú también, Bruto, hijo mio?).
Nadie debe olvidar lo ocurrido antes y después del 24 de marzo de 1976. Es historia. Memoria, repudio, lágrimas por los desaparecidos ■
En el antiguo cómputo romano y en el eclesiástico, el día 15 de marzo, mayo, julio y octubre y el 13 de los meses restantes, los idus fueron cualquier día para los asesinos en el calendario trazado por estos lares antes y después de marzo de 1976, ejecutados por bandas militares y civiles, apañados por descendientes de asesinos de indios y gauchos, son tiempos de justicia y memoria, ni olvido, ni perdón. Carlos Arturo Trinelli
ResponderEliminarPor la Triple y el proceso, y luego de un año de cárcel, debimos...debemos sobrevivir y moriremos en el exilio. Sólo pieles de elefante ignoran este mensaje. Quienes vivimos dentro de la Argentina, o los exiiados, jamás podremos olvidar la tragedia de los argentinos...
ResponderEliminarel autor
¡Bravísimo por lo de la fecha simbólica! Antes ya se había empollado el huevo ( no digo de la serpiente, en respeto a los ofidios de Juany Rojas). Y ahora siguen vivas las secuelas.
ResponderEliminarPero creo en la palabra como faro y también como acción. Es peligrosa para los que detentan mal el poder, y es buena siembra. Pensemos en Rodolfo Walsh y Ferderico García Lorca. . . y otros más.
Gracias por los comentarios de lectores sensibles, que recuerdan, evocan y no se dejan envolver por "el arte por el arte" en días de triste y luctuosa memoria. Gracias "alta ave del cielo". andrés
ResponderEliminarBuena idea la tuya con "Los idus de Marzo"... para refrescar la memoria de los distraídos y recordarnos lo importante que es cada cosa que sirva para mantener el "Nunca Más"
ResponderEliminarLos idus de marzo...todo el dolor por tu nostalgia , por el exilio, por tantos amigos que no están.
ResponderEliminarAbrazos, amigos.
amelia