viernes, 19 de febrero de 2010

POESÍA de RICARDO RUBIO

ACUARIO NOCTURNO,

RESPLANDORES


Ves que la noche esparce carbones por el aire
y sientes la piel de un roce en los recuerdos.
Imaginas los dedos revisando ebrios la negrura
y en la insensatez del alma tu esperanza estalla.
La boca y los ojos se unen en la soledad
que siempre es una
ahondando el sabor que acuna la tristeza.
Brillan atónitas las uñas 
y el dolor no se desdice.

Sólo tiempo en el tiempo,
diminutas huellas
que se hunden para siempre entre los meses;
arcano temor:
destino de tren antiguo
derramando un largo grito por el aire.


MEMORIA

Aún en el instante de mayor luz
se acuna en la médula 
el temblor del primer grito
y el silencio posterior y repetido.


El recuerdo es una fiera inestable
que odia el presente,
deliberadamente evita la magia del brote,
los corredores con plantas
y el remanso.


La evocación 
es el momento más largo del universo,
pretérito inmóvil del dolor.


Larga es la espera de un cuerpo 
en este siglo al que atormenta la sombra.

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3 comentarios:

  1. Poetizar desde lo sombrío para que la luz no se pierda. Maravillosos poemas. Para volver a leeerlos.
    MARITA RAGOZZA

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  2. Poesía de excelencia.Realmente, es un acuario nocturno. Me encanta este autor. amelia

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  3. Poeta que da resplandor a la sombra y a la espera con estilo peculiar.
    Celmiro

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