NORMA SEGADES - MANIAS
DÉBORA
"Las aldeas quedaron abandonadas en Israel, habían decaído, hasta que yo Débora me levanté, me levanté como madre en Israel." (Jueces 5:7)
Entre Rama y Betel
bajo una palma
administro la voz de la justicia
y nadie se aventura a censurarme
a pesar del gravamen de mi sexo cercado por costumbres y prejuicios.
A mi lado
los hombres de Israel que fundaron los días de la sangre,
del escudo
y la lanza
y el coraje expuestos a la furia
en los combates ofrendados al dios del exterminio;
a mi lado
las tropas israelitas
que vencieron las sombras de los miedos,
que enfrentaron la heroica rebeldía de las resueltas tribus cananeas
resistiendo despojos
y designios
intentan desterrar
de sus atuendos
los desvelados rastros de la angustia donde acontece la supervivencia,
intentan desterrar
de sus miradas
la austera dignidad del enemigo.
Mientras lloran las madres de los hijos
que sembraron el campo de batalla con sus valientes corazones rotos
por causa de una tierra conquistada a golpes de traición y latrocinio.
Mientras lloran las madres su agonía
sobre las orfandades
y las ruinas
y el horror de la tierra mutilada
y los sueños,
los pactos,
las promesas yaciendo a los costados del martirio.
Soy Débora.
Yo juzgo y profetizo.
Llevo sobre mi espalda el privilegio de haber guiado a Barak a la victoria.
Por mí el pueblo celebra
y agradece
cantando la impiedad del regocijo.
Bendito será el nombre que me dieron hasta el final de todos los oráculos.
Pero hoy no puedo alzar mis alabanzas.
Hay muñones de muertes absolutas corrompiendo el altar del sacrificio.
º º º º º º
EVA
“De la costilla que el Señor Dios había tomado del hombre formó una mujer y la llevó ante el hombre. Entonces éste exclamó: Esta vez sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne. Esta será llamada mujer, porque del varón ha sido tomada." (Génesis 2:22-23)
Útero de dolientes laberintos donde la humanidad se salvaguarda,
grito el nombre del dueño de la vida,
mientras llovizna el alba
sobre el huerto
y ha comenzado el tiempo de los pájaros.
Grito el nombre del amo de los sueños,
insolente señor de los caprichos que cinceló en un hueso mis caderas,
mis senos contundentes,
mi cintura,
mis tobillos de andar acompasado.
Grito el nombre del verbo hermafrodita que me impuso
en la noche originaria
mi credencial de hembra,
de varona dispuesta a entretejer mi dinastía con hilvanes de semen desvelado
y luego,
sin piedad,
hirió mi rostro con el amargo musgo del olvido,
me arrebató en la fiebre de su cólera,
me expulsó hacia el naciente del repudio con espadas de fuego entre las manos.
Soy Eva.
Soy la madre del castigo.
Detrás de mi vendrán cendales negros,
y un silencio de sangre sin embriones vaciada en las arenas de los siglos
y una historia de sexos mutilados
y piedras lapidando los pezones
y puños como rocas
y puñales
y la profanación de la inocencia
y manos machacando en los morteros el secreto nutriente de los granos
y el pulso del dolor atravesando por acequias de carne desgarrada
y la muerte
acechando en los rincones
como un perro de presa que reclama su diezmo de menudos calendarios.
Grito el nombre del padre,
a voz en cuello;
increpo a su desdén,
prevengo al viento acerca de estas lunas insumisas
que habrán de continuar sobreviviendo
a pesar del desprecio
y los agravios
º º º º º
la palabra, en el talento de norma, es todo un Arte Poético. Felicitaciones por el tono dado a temática tan profunda. susana zazzetti.
ResponderEliminarEXCELENTE, EXCELENTE!!
ResponderEliminarEDGAR BUSTOS
Intuyo Norma en toda esta serie de poemas que venimos leyendo, la constitución de una gran obra poética. Mis sinceras felicitaciones
ResponderEliminarLily Chavez
Cuánta fureza en tu poesía, paloma, cuánta fuerza en tu vida. Mi abrazo.
ResponderEliminaramelia
Estos poemas de Norma Segades son para guardar, es como recorrer una galería de arte de la palabra. Felicitaciones. Magnitud de poeta.
ResponderEliminarNo encuentro palabras para agradecer el estímulo que me brindan sus comentarios.
ResponderEliminarSe trata de un libro de 53 poemas titulado "En nombre de sus nombres"
Googleenlo y lo tendrán a su disposición en la gratuidad de la red.
Abrazo virtual y cordial, Norma