sábado, 3 de abril de 2010

MARIA ROSA LOJO  - ( Buenos Aires - 1954)

 Serie Artilus 15


EL DON DE LA  BREVEDAD. 
  
Transparencia
 
Todos los atardeceres la mujer se sienta en el patio de la casa. Si alguien la acompañara vería cómo su cuerpo se vuelve transparente al compás de las sombras.  Primero surge un mapa encendido de venas y vísceras, luego, más abajo, una población de huesos huecos por donde el viento corre como un golpe de música.
   La mujer sonríe y levanta un brazo en la noche incipiente.  Unos minutos más y se apagará el resplandor del hueso iluminado por canciones remotas y ocultará la piel el color de la sangre.
  Cuando todo concluye, ella guarda la silla bajo el alero y vuelve a la cocina, llevándose el secreto de la transparencia del mundo.
 
 
    Desde el jardín
 
El pequeño jardín se expande en la oscuridad. Crecen los cuerpos verdes dilatados por la luz invisible de la lluvia.  Crecen las floraciones pesadas como campanas y resonantes con el latido de los corazones de la tierra.
  El hombre y la mujer respiran con un solo pulmón el aire húmedo y dormido.  Alargan las manos como ramas que buscan el ojo de la luna, entrelazan las piernas en la curvatura de la hiedra, entremezclan líquidos radiantes y olores que fosforecen.  A la luz de su amor comienzan a verse los colores olvidados, y las flores y los frutos se reúnen con el rojo y el azul, el oro y el violeta.  Cuando el rito del amor termina las corolas se pliegan y se guardan y los cuerpos humanos se amparan uno en el otro, cumplidos y cerrados en el regazo del mundo.  
 
               de "Poetas argentinas"
 
                 corresponsal Susana Zazzetti
 

1 comentario:

  1. Susana: cómo me gustaron los dos trabajos de Ma.Rosa Lojo que has elegido, Amiga. Una brevedad que, por tan breve, es capaz de acunar la transparencia y...una escena amorosa en que el jardín y sus integrantes, son capaces de sostener la esencia y los giros de los amantes. MAGNÍFICOS !!! Te aplaude,

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