miércoles, 15 de junio de 2011

AMELIA ARELLANO

AMELIA ARELLANO



EL INSTIGADOR
(Segunda instancia psiquica)

Estimado y respetado Padre José:
                                                     De nuevo aquí en la glorieta de las glicinas, preparada para confesarme con Usted, veo el asombro reflejado en su bondadoso rostro. Y si, Padre usted me enseñó que la vida es eterna, por lo tanto sé que desde arriba me guiará y me escuchará. Si, ya lo se, no será face to face, pero será de alma a alma.
-Padre: desde que Usted falleció…
-Ah, no, no Padre, a mi con culpas no. Si bien yo le envié la carta, Usted nunca me dijo que era cardíaco y eligió, solito, el camino a la gloria eterna.
-¿Qué por qué no me confieso con otro? ¿Y por qué debería hacerlo Padre? Además Usted también me dijo que si no estaba en estado de pecado mortal, con un acto de constricción, podía comulgar. Ah, eso si Padre, soy de comunión diaria. Por otro lado, estimadísimo, Usted conoce parte de mi historia.
¿Qué pasó con el Inquisidor? Bueno, no le voy a negar que cuando Usted falleció… Si , Padre, no me interrumpa, por favor, a Usted  no lo matan –Usted fallece voluntariamente-
 Le decía…cuando Usted falleció, el maldito me dio una gran reprimenda y una penitencia: hacer el reclinatorio de roble con la placa de bronce, mire padre tuve que vender mis aros de oro, pero no me arrepiento, ahora me encargo de que esté limpiecita y brillante.
La cosa es que a partir de ahí nos hicimos chanchos amigos (hasta ayer), ay, disculpe Padre pero a menudo se me escapa este lenguaje vulgar.
Mire Reverendo, ¿Recuerda mi lucha con el Inquisidor, bueno ahora es la lucha, con el Instigador, si Usted supiera las cosas que me insinúa, pero me mantengo en el recto sendero… no sé hasta cuando, Padre.
Esa es una de mis grandes preocupaciones. Han pasado tantas cosas desde que Usted falleció Padrecito, que si estuviera vivo se muere de nuevo. No recuerdo la cronología, pero le iré contando como me salga.

Me sentía tan aliviada sin el Inquisidor, tan libre al principio, salía, pero de un sopapo lo callaba. Ay, Padre, Usted se va a tener que acostumbrar a estas palabras burdas, salen sin querer no puedo controlarlas y Usted sabe que lo dicho, dicho está.
 He tenido sucesivos problemas  y hablando de palabras, uno fue con  Sor Adela, si, ésa que tenía problemas de audición. No se si Usted sabe que nos cortan el pelo muy cortito; nos estábamos peinando, y le juro que ella fue la que empezó y la que hizo el lío.
Me dijo que mis pelos parecían de oveja (por los rulos) y yo no me pude contener y le dije:
-Y tu cabeza es pura cerda-
¡Viera la cara que puso!  Me acusó ante la madre Superiora y  dijo que le había dicho que su cabeza era pura m… Ay, no, Padre no me ánimo a  escribir esa guarangada, Usted infiera.  Si, la madre superiora tiene la  misma cara de vinagre de cuando Usted venía.
¿A quien castigaron? A la que suscribe, Padre.

Otra vez estaba resfriada y con catarro y yo le dije a otra hermana:
-Lo que pasa  es que no esputa tiene que hacer como yo, sino jamás se va a mejorar.
Otra vez el lío, y está vez no fue por que oyó mal, malinterpretó; y creo que a propósito. Bueno la cosa es que no le hablé más y listo.
Al inquisidor lo había reemplazado el instigador y si bien me agradaba, me traía muchos problemas. ¿Sabe que en geografía hay una profe nueva? Nos hemos hecho amigas y dice que soy la hermana de San Sulpicio, yo no sé quien es pero lo mismo me río, bromeamos mucho y nos divertimos. Y si Padre, las dos jóvenes entre tantos vejestorios.
Usted recordará que todos los años tenemos vacaciones y este año, ella me había invitado a ir con su familia, son del Opus, nariz parada, pero conmigo son buenos y viera como viajan  y como chupan, todo importado, perdón Padre.
Estábamos hablando de eso y me dice, con una sonrisa traviesa.
-Te parece que vamos a Grecia a la  Isla de Lesbos?
Yo, salté y la abracé y dije
-Si, si, sos un ángel-
Ahí es cuando entra y observa la escena la flaca pata de tero, la Profe de Latín; esa, si Padre, la que es íntima de la Madre Superiora, que  además de mala, es más aburrida que bailar con el hermano.
Otra vez me llama la Madre Superiora, (que entre paréntesis cada día está más vieja y más bruja) que si era ingenua o me hacía, y bla bla bla… Usted me conoce bien Padre, sabe  de qué hogar vengo y asi se lo hice saber a la madre. Las únicas Islas que conozco son las Islas Malvinas y que perdimos la guerra por culpa de un milico de la dictadura  que andaba siempre borracho ¡Bueno Padre! ¡No me reprenda, es que es eso lo que me contó mi padre! Y mejor que no le cuente lo que decía de Uds.
 Sigo:
¡Flaca degenerada! ¿Qué sabía yo de las cochinadas que me contó la Madre?
Lo peor es que de nuevo me castigan y me quedo sin vacaciones, pero hubo una pequeña venganza:
La profe de Geografía,  hizo tal quilombo, que echaron a la flaca  pata de tero-
¿Qué si sentí culpa? No, Padre, para nada, bien se lo merecía la flaca  mal pensada.
La cosa es que vengo teniendo problemas, no me puedo controlar. Se habló de que tenía que ir a una psicóloga; y fui. Si, claro que fui, pero hablé 40  minutos  y lo único que dijo fue.
-Son cien pesos-
Ahora estoy haciendo terapia on line - ah sí , me he puesto moderna, hasta facebook tengo – a escondidas, Padre.

No sé que hacer, yo aquí estoy cómoda, confortable y no quisiera irme pero no sé que me pasa es como si tuviera alguien adentro que no soy yo, pero que hace cosas por mi. A veces pienso si no es cosa del negro para que me aleje de Dios. Recuerda Usted a quién le decimos el negro, claro Padre ¿o se imagina un diablo rubio? Me agrada ser como siempre quise, pero me trae problemas.

¡Ah! Veo que está apurado ¿Pero es que tiene cosas para hacer allá arriba?
Bueno, le cuento la última.
Ese día la capillita estaba impecable. Se casaba una ex alumna, la chica Panza, y si, hay tantos apellidos raros.
Yo estaba en el  en el primer banco para cantar el Ave maría.
 En plena ceremonia cuando el padre Bodas Chico…
¡Bodas Padre!
Usted ya se parece a Adela. El padre pregunta lo de rigor y cuando dijo el apellido del novio: Vaca, no sé qué asociación hice que me dio tanta risa que no podía parar, ya me desmayaba por el esfuerzo de reírme para adentro y… ¿sabe que pasó? ¡Ay, no Padre , no me animo!   Mejor lo dejamos para el primer viernes del otro mes ¿le parece?
Padre, no me trabaje la culpa…está bien, le cuento.
Le decía que ya no podía más, hacía tanta fuerza para no reírme que mis conductos vesicales, ya se reventaban…y bue, largué padre…
¡Que alivio Padre! ¡Que placer!
Pero también ¡Que súper papelón! para colmo mi pollera es gris… Ah, si, ya no tenemos el hábito. Es una pollera gris clara que se iba a notar la humedad. De ahí, que  la risa casi se transforma en llanto. La cosa es que no me quería levantar y la cosa se estaba poniendo fea…y me salió la solución. Si, Padre, creo que soy una actriz frustrada. Me deje caer suavemente, como una flor marchita sobre el banco
Pobre, lo siento por la chica; Panza de Vaca, ahora.
 No, no Padre ¿por qué pecado?  Apenas una pequeña simulación . Se me ha puesto más estricto Usted
Hubo un revuelo, me llevaron a una clínica, se hablo de un ACV y ahí es cuando me envían a la psicóloga.
Bueno, queridísimo Padre  lo dejo, no quiero robarle su precioso tiempo…
¿Que, qué? Padre, Padre, como me conoce y si…algo de eso hubo.

Resulta que él aparece un día, mire como son las cosas, yo nunca atiendo la puerta, pero la hermana portera estaba enferma y él nunca viene pero su cadete estaba enfermo  también. Se la hago breve. Yo lo traté cortés, pero fría, pero él no se achicó e insistió, insistió. Resulta que ahora era dueño de una cadena de confiterías y panaderías, me prometió el oro y el moro, padre. Y uno tiene sus debilidades, casi, casi, estaba decidida a dejar el Convento.
 Ese día nos juntábamos en  la sacristía y ahí decidíamos. Cundo la hermana portera me dice, ¿sabes quien falleció?  y dice su nombre…me desmayé, Padre. Claro que no llamó la atención esta vez.
Desde ese día Padre, sabe quien aparece ¡El odioso inquisidor!
¿Recuerda que le conté que cuando niña tenía la colección de Constancio C. Vigil? En ese libro hay un personaje: la dientuda, que queda viuda.
También creo haberle contado que cuando tenía 7 años me salen dos dientes, parecía conejo y mis compañeros me llamaban la dientuda.
 Bueno desde ese día me atormenta día y noche.
“…y se quedó la dientuda
Con sus largos dientes viuda,
En espera del marido,
tantas veces prometido.”

Y aquí estoy, Padre, tironeada, por un lado el inquisidor cantando y diciendo eso te pasó por ser mala mujer, y por otro lado el Instigador ¡Dale, búscate otro!
Me voy a volver loca en serio, padre. Ruegue por mí y hasta la próxima.


9 comentarios:

  1. Buenísimo este monólogo interior. Este debate entre Eros y la Culpa (tan inculcada además por algunass Religiones). El relato me pareció muy psicoanalítico, irónico y de fácil lectura; (no pocas virtudes) . Felicito a la Escritora.
    G.U.

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  2. Interesante monólogo Amelia, fue lindo leerte.

    Un abrazo

    Lily Chavez

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  3. Torquemada y sus adeptos presentes. Castigando pecados y pecadillos de los que no se pueden desprender. Pero el agua mansa que brinca de cada letra,apaga el infierno que nos quisieron imponer.

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  4. Indagaciones prematuras han detectado en estado psicósico una cabra en la isla de Lesbos que arribada a destino se desvia del camino.
    Ciertas travesuras adolescentes ( sin resolver)
    han erosionado ironicamente en varias personalidades que religiosamente fuera de lugar siguen sembrando dudas...
    Receta: dejar de hablar con los extraños de uno mismo.
    En resumen estas locuras encantan y la sonrisa aparece y desaparece como un sol jugando con una nube.

    Celmiro Koryto

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  5. Graciosa y velada crítica a la represión y a las culpas, un grato momento de lectura,saludos, Carlos Arturo Trinelli

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  6. Ame, Ame : Si no estuviera tu nombre sabría que eras tú. Te refeja. Alocada , con gran sentido del humor (imposible estar contigo sin reírse) Y a la vez con un humor ácido y critico . !Dale seguí pegandole al Psicoánalisis y a la iglesia ! Con todo mi afecto . Y aprovecho para saludar al Editor, siempre hablas de él .
    Alejandro Alcántara Ruiz

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  7. Muy bueno ,Amelia.Envidiable sentido del humor para expresar un tema tan hondo.
    Muchas gracias.
    Cristina

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  8. EXCELENTE, ESPECIAL PARA UNA FRÍA TARDE DE SÁBADO. FELICITACIONES AMALIA. MI AFECTO. Marta Comelli.

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  9. El humor nos salva del hastío: el tuyo, Amelia, nos lleva a otros planos so pretexto de una confesión concupiscente y "superficial". Abrazo,
    andrés

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