OLGA CABRERA LADU
Cargamento
Los pies penetran la tierra
remarcando huellas.
Las lágrimas bordean el límite
atrincherando tristezas.
Crujen los techos.
El hacha
cargada de golpes
descansa su filo bajo la luna.
En la mesa
porciones de pan
se desmigajan ante el hambre
y el vino embriaga
la corteza de la miseria.
Ni el adiós
ni el olvido
estrangularon
aquel tiempo.
corresponsal Susana Zazzetti.
Los pies penetran la tierra
remarcando huellas.
Las lágrimas bordean el límite
atrincherando tristezas.
Crujen los techos.
El hacha
cargada de golpes
descansa su filo bajo la luna.
En la mesa
porciones de pan
se desmigajan ante el hambre
y el vino embriaga
la corteza de la miseria.
Ni el adiós
ni el olvido
estrangularon
aquel tiempo.
corresponsal Susana Zazzetti.
Exelente las palabras y el peso justo en el poema. Las imágenes que describen son desgarradoras. Como siempre lo breve e impactánte.
ResponderEliminarFelicitaciones.
Vero
Como siempre impactánte las imágenes descriptas y el peso aniquilante de las palabras.
ResponderEliminarLo breve y contundente.
Felicitaciones
Sil
cuánto dice este poema, olga, tan desgarrador, tan bellamente expresado. susana zazzetti.
ResponderEliminarOlga, estremece por el tema, aunque el poema es una belleza. Magnífico! Marta Julia Ravizzi
ResponderEliminarHermoso y sentido poema que nos hace miga a todos.
ResponderEliminarCelmiro Koryto
Olga, admiraré por siempre tu poesía. Es una poesía muy limpia, que dice, que da, que se queda en el otro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Lily Chavez
Poema tan contundente como la tierra misma, es bueno leerte y entrar sin miedo en esas escenas de vida por tu forma de decirlo.
ResponderEliminarUn abrazo, Olga.
Betty