BORGES |
Georgie le decían en casa desde su infancia, sus lectores como Borges, así a secas lo conocimos. Este escrito no trata de analizar ni la obra, ni la vida, ni su ideología del que sin lugar a dudas fue uno de los más brillantes y polémicos escritores de nuestra América Latina.
Simplemente se trata de ver la conexión de Borges con el Uruguay, con su capital Montevideo, con Paysandú o con esa “Banda Oriental” que él llamaba así cariñosamente retrotrayéndose en la historia rioplatense.
En las venas de Jorge Luis Borges corría sangre oriental, según él, había sido concebido en la República Oriental del Uruguay, específicamente en el departamento de Paysandú.
Su abuelo paterno el coronel Francisco Borges Lafinur había nacido en Montevideo y falleció en la batalla de La Verde. Borges le dedicó el poema al coronel Francisco Borges (1833- 1874).
Durante una entrevista al ser interrogado por su amor a la Banda Oriental (así llamaba al Uruguay con gran afecto y respeto) comento que una vez su padre muy seriamente le había dicho que el lugar de nacimiento de un hombre no era sólo donde este nacía, sino donde había sido concebido.
“Desde este punto de vista puedo considerarme oriental”, dijo Borges.
Su relación con el Uruguay la encontramos en su Autobiografía, la cual inicia de la siguiente manera: “No puedo precisar si mis primeros recuerdos se remontan a la orilla oriental u occidental del turbio y lento Río de la Plata; si me viene de Montevideo, donde pasábamos largas y ociosas vacaciones en la quinta de mi tío Francisco Haedo, o de Buenos Aires”.
En un tema “sagrado” para ambas orillas del Plata (Argentina y Uruguay), como es el del tango, Borges decía que éste había nacido en Montevideo: “El tango nació de los compadritos que habitaban los suburbios del Río de la Plata, probablemente en la orilla oriental”.
Jorge Luis Borges, da a conocer esto en su poema “Milonga para los orientales”.
“Milonga del primer tango/ que se quebró, nos da igual/ en las casas de Junín/ o en las casas de Yerbal/”. Las dos últimas son calles que pertenecen a la Ciudad Vieja de Montevideo.
Borges ambiento algunos de sus cuentos en la capital del Uruguay. La investigadora uruguaya Ana Inés Larre Borges ha señalado que Montevideo aparece en su literatura como “un refugio civilizado para quienes huyen de la barbarie”.
Recordemos que una vez al preguntársele a Borges que pensaba del sol, respondió: “Estoy podrido de literatura. No podría responder hablando, del sol, no tengo el hábito de pensar directamente en el sol, sino en imágenes, en textos, en relatos del sol”.
Ese sol, que una vez en una entrevista en el año 1963 dijera: “El sol por las mañanas, suele pasar por San Felipe de Montevideo antes que por aquí”.
Montevideo siempre estaba presente en la mente de Borges, ante una pregunta que le realizara Seamus Heaney (Premio Nóbel de Literatura 1995) en una entrevista realizada en 1981 sobre el modo más que el material de los sueños lo que principalmente influye e inspira su obra, la respuesta incluye el cuestionamiento. ¿Estoy en Buenos Aires o en Montevideo?
Esas dos ciudades que para Borges siempre formaron parte fundamental de su vida, aunque no esté en ninguna de ellas. Cuando regresó de Europa en 1921, Borges se lanzó con pasión al redescubrimiento de la Argentina y, más particularmente de Buenos Aires, como lo muestra en esta estrofa del poema “Barrio” del libro Fervor de Buenos Aires:
Esta ciudad que he creído mi pasado
es mi porvenir, mi presente;
los años que he vivido en Europa son ilusorios.
He estado siempre (y siempre estaré) en Buenos Aires.
El poeta Jorge Luis Borges en unos versos magistrales nos pinta así a la capital de la República Oriental del Uruguay:
Montevideo
Resbalo por tu tarde como el cansancio por la piedad de un declive.
La noche nueva es como un ala sobre tus azoteas.
Eres el Buenos Aires que tuvimos, el que en los años se alejó quietamente.
Eres nuestra y fiestera, como la estrella que duplican las aguas.
Puerta falsa en el tiempo, tus calles miran el pasado más leve.
Claror de toda la mañana, nos llega, sobre las dulces aguas turbias.
Antes de iluminar mi celosía tu bajo sol buenaventura tus quintas.
Ciudad que se oye como un verso.
Calles con luz de patio.
Lic. Washington Daniel Gorosito Pérez
e-mail: wd_gorosito@yahoo.com.mx
Gracias por el aporte.
ResponderEliminarEs verdad , es más valido hablar de orientales ...o ríoplatenses.
amelia
Una faceta de Jorge Luis Borges que accedo por primera vez. Gracias a la Revista por compartir.
ResponderEliminarConfeso el sentimiento de Borges por el Uruguay, lo demás son arcaísmos y nostalgias, Carlos Arturo Trinelli
ResponderEliminarInteresante!!
ResponderEliminarLily Chavez