jueves, 3 de noviembre de 2011

MARTA PIZZO: Muchacha de barrio, poeta y letrista de tangos (autoentrevista)


MARTA PIZZO


Malena cantaba el tango y Marta compone sus letras


EL TANGO Y YO (Marta cuenta su historia)
Se ve que estuvo siempre ahí, tan presente, acariciándome desde la mismísima cuna… Y ya sabemos que lo que se mama no se desprende. Su melodía convivió conmigo en innumerables ocasiones, pero si hay algo que tengo impregnado en la parte más memoriosa de mi alma, son las tardes previas a la nochebuena en las que, ya desde temprano, se escuchaba sonar en el tocadiscos de mi casa mientras estábamos de preparativos (también guardo en mi olfato el olorcito a carne asada que emanaba de nuestra parrilla o de la de algún vecino).
Mi viejo fue un chapista que laburaba en La Corporación, y a fines de los años 50 dejó su Boedo natal para mudarse con su mujer y sus dos primeras hijas a la Provincia de Buenos Aires, más específicamente a San Justo. Allí tuvo acceso a la vivienda, un chalet que se construyó con el crédito Eva Perón, a pagar en 30 años, y se puso un almacén en un mercadito del barrio. Una verdadera locura irse al “campo”, según su familia paterna. Con el tiempo, Don Humberto levantó un galponcito en el fondo de la casa y allí, en el horario de la siesta, se dedicaba al cuidado de sus canarios y a la reparación de paraguas (increíble, ahora se tiran!!!!). Gran compañía era la radio, cuyo dial estaba “clavado” en su programa favorito a esa hora “La danza de la fortuna”. Se entretenía con la quiniela y –sobre todo– con los tangos. Y ahí es donde entro yo (su tercera nena, gestada en esa casa), que siempre feliz le hacía de peón, y lo miraba trabajar. Ese germen quedó instalado.
Los tangos para mí eran algo cotidiano. En esa época no me preguntaba por qué me gustaba o no una música; escuchaba, memorizaba, bailaba. No les prestaba especial atención a las letras pero las aprendía y me encantaba hacer mímica (así se le decía). Ponía la radio y con una escoba jugando de micrófono, actuaba frente al espejo. Cantaba como si fuera Julio Sosa (mi preferido), Jorge Sobral, Enrique Dumas, Raúl Berón… y obviamente Tita Merello y Nelly Omar. También me gustaban mucho Lolita Torres y Violeta Rivas.   Así fue que mis padres decidieron regalarme una guitarra (de Antigua Casa Nuñez) que aún conservo. Hasta hoy retengo el perfume de la madera dorada, hermosa, brillante… Estudié música unos 5 años. La profesora, Lidia, los sábados que teníamos ensayo con “Las pequeñas guitarras del alma” grupo instrumental, me hacía ir más temprano que mis compañeros para afinar todas las guitarras (éramos como 15). Decía que yo tenía un muy buen oído. Nos enseñaba bastante folklore, y participábamos en concursos que organizaba la Municipalidad. También formaba parte de un dúo “Marta y Nora”, con mi amiga Nora Goijman, en el que cantábamos folklore y nos acompañábamos.  El tango no estaba muy presente allí, y menos en la escuela.
Ya en la adolescencia la teoría y el solfeo me aburrían bastante, y dejé, porque además la profesora se mudó de barrio.  En la escuela secundaria el tango directamente no existía.  Principio de los ´70, comencé a escuchar Sui Géneris, Spinetta, Moris, Vox Dei, Pedro y Pablo, Raúl Porchetto, Litto Nebbia, Pappo…  Al terminar los estudios tuve que salir a trabajar ya que mi papá falleció cuando yo tenía 15 y entonces había que ayudar en casa. En ése momento  fue cuando comencé a escribir mis primeras letras; a los 18 hacía coros en un conjunto de rock y ya cantaba algunas canciones propias.  ¡Nada de tango!
Luego vinieron tiempos difíciles para mí en lo personal, de mayor responsabilidad, en un país de seres que cometían atrocidades desde del Estado y hubo quienes casi ni nos enteramos. La música que sonaba en las radios venía de otros lares. Fines de los ´70 y casi hasta 1981 es como que tengo un paréntesis musical, en el que circunstancias como el trabajo, problemas familiares, y el hecho de ignorar muchas de los horrores que estaban ocurriendo, siento que hicieron que me aleje un poco de la música nacional. Pero ahí entró en mi vida, con todo lo que eso significó y significa para mí, Joan Manuel Serrat. Yo creo que él fue también nexo entre la música, la poesía, el tango y yo. Porque a pesar de que él es catalán… el Nano ¡¡¡tiene actitud tanguera!!!
Mediados de los ´80, ya casada, habiéndome mudado unos años a Bariloche, con mi primer hijo, entre pañales y nostalgias, yo seguía escribiendo poemas, cantaba canciones de María Elena Walsh, Pablo Milanés, Silvio Rodríguez… y escuchando mucho rock nacional. La guerra de Malvinas y el retorno a la democracia habían hecho lo suyo. En tango, me llamaban la atención las letras de Eladia Blázquez; sentía que me representaban.
Ya de regreso a Buenos Aires, años ´90, uno de esos poemas, que fotocopiaba y daba a conocer a mis amigos, llegó a manos de Quique Rassetto, un guitarrista, compositor, que había trabajado conmigo en el Banco Provincia. Recuerdo siempre sus palabras: “Esto es un tango –dijo–. ¿Me permitís que intente ponerle una música? Era la letra de “A mi calle”, originalmente llamada “A mi calle Bermúdez”, dedicada a la calle de aquél chalecito de Villa Luzuriaga en que me crié. Ese fue mi primer tango.
De ahí en adelante no paro. Reconozco con honestidad que no sé mucho de historia del tango, ni de sus orquestas, autores, compositores… Yo siento que entré a él por otra puerta, por la puerta natural de una nena que vivió su infancia escuchándolo, en esos años donde las radios lo pasaban cotidianamente. Y encontré, sin buscarlo, en su melodía, un maravilloso “envase” donde dibujar mi impronta con las letras. Las causalidades de la vida hicieron y hacen lo suyo.
Espero seguir aprendiendo de los maestros poetas de otras épocas y de los contemporáneos, seguir pudiendo expresar lo que veo a mi alrededor, seguir conociendo intérpretes, músicos, tan talentosos!!!  y –sobre todo– continuar disfrutando mientras esto ocurre. Yo me considero una escritora de poemas que hablan de lo que nos pasa, desde lo cotidiano y sencillo. ■
Marta Pizzo Octubre 30 de 2011

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TRES TANGOS, letra de Marta Pizzo

De gusano a mariposa (tango)


Letra: Marta Pizzo – Música: Quique Rassetto

Debajo del felpudo de la angustia
en que nos revolcamos con prisa y sin piedad.
Girando en arreboles de nostalgia,
fracasos y pesares que da la soledad.

Allí, donde el prejuicio no perdona,
sin fe, sin fantasía, con pura realidad.
Allí, donde la muerte y la locura
inundan y circulan con toda libertad.

En este nuevo siglo que parece
ser cosa del demonio, te digo la verdad:
ya sé que no es tan fácil pero dale,
si vos querés, metele... la vida se nos va.

Estribillo

Tal vez valga la pena un nuevo intento
armate de coraje y dignidad,
salite del carril de la derrota,
vení, rompé las reglas... también voy para allá.
Mirá, lo simple de las cosas...
jugate, total ¡qué más te da!
Pasate de gusano a mariposa
dejá culpas miedos... y volá.
repite Estribillo



Que se me ocurra (tango 2010)
Música: Ariel Ascheri – Letra: Marta Pizzo

Que se me ocurra ser mejor
en la estación del despertar,
cuando algún sueño se apagó
y otro me viene a acariciar.

Que se me ocurra compartir
lo necesario y lo ideal,
lo que me cuesta y lo que no,
lo que me alegra y me hace mal.

Que se me ocurra sin porqué
sentir que el hoy será mi ayer
y andar así, con lo que soy,
sin antifaz, sin un tamiz
en que se esconda algo de mí
por entregar, por admitir,
si en cada luna, en cada sol
va mi ilusión por ser feliz.

Que se me ocurra recordar,
manifestar, agradecer
el agua, el aire y el olor
de alguna flor por florecer.

Que se me ocurra valorar
lo cotidiano, lo inusual,
la voz amiga y el amor
que se me cruce, hasta el final.

Cada espera es un adiós (tango)


Letra: Marta Pizzo – Música: Emilio de la Peña
Ganador del Certamen SADAIC 2007

Siento que respiras en mis brazos,
voy danzando en el perfume,
hago puerto entre tus labios.
Breve pasajero de mi tímida inquietud,
loco corazón en plenitud.

Pálida sentencia de una luna
que nos niega la fortuna
de entregarse a pleno día.
Grito cerrado de la entraña,
juego tan difícil de mentir.

Déjame abrir la ventana,
dame tu fresco rocío.
Este amor, tesoro sólo mío
sueña anclado en mí.
Duele este amor sin mañana,
daña el fulgor del hastío…
No es vivir estar sin vos;
cada espera es un adiós.

Vuelves y mi nube se hace estrella,
que retoña la esperanza
y despeja tantos miedos.
Cálido horizonte con mil pájaros en flor,
íntimo ladrón de mi dolor.

Canto, lloro, añoro, desespero,
me resguardo en el certero
palpitar de tus caricias.
Corto pasaje a media historia,
trama que me cuesta descubrir.

ººººººººººººººººº



16 comentarios:

  1. El Tango y sus admiradores es una faceta importante de la vida de los argentinos. Marta Pizzo es una continuadora de la tradición tanguera de Buenos Aires. Marta habla de sí misma con una modestia digna de resaltar. Letrista de los tangos de la época contemporánea, tiene estilo y aciertos.
    Alberto

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    1. Muchas gracias Alberto... Lamento no haber visto antes estos comentarios... falta de cancha por la edad jaja! Pero me alegra encontrarlo hoy, y lo valoro!! Un abrazo

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  2. " Lo que se mama no se desprende" Recorrer estos pensamientos escritos en forma espontánea acercan la vivencias, una modalidad de entrevista natural, donde un siente como más vivo el arte y su llamado a partir de la historia particular.
    El tango para Marta ha sido el molde y el lenguaje para volcar su literatura. Sus poemas tiene el ritmo del compás tanguero, con letras originales.
    Felicitaciones a la Revista por crear este espacio y a Marta.
    MARITA RAGOZZA

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    1. Muchas gracias Marita... tus palabras me llegan al alma. Agradezco mucho este espacio del amigo Andrés! Perdona que llego con retraso, pero no había visto estos comentarios! Besos

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  3. Marta: volví a leer tu "autoentrevista" y le descubrí, atolondrado, nuevos y hermosos matices. Mucha sensibilidad y modestia, y letras de tangos:

    "Déjame abrir la ventana,
    dame tu fresco rocío.
    Este amor, tesoro sólo mío
    sueña anclado en mí.
    Duele este amor sin mañana,
    daña el fulgor del hastío…
    No es vivir estar sin vos;
    cada espera es un adiós.

    Vuelves y mi nube se hace estrella,
    que retoña la esperanza
    y despeja tantos miedos.
    Cálido horizonte con mil pájaros en flor,
    íntimo ladrón de mi dolor.

    Canto, lloro, añoro, desespero,
    me resguardo en el certero
    palpitar de tus caricias.
    Corto pasaje a media historia,
    trama que me cuesta descubrir.

    Un hallazgo en compás de 2x4 . Andrés

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  4. HIJA DE PADRE TANGUERO Y CANTANTE DE TANGOS EN SU PUBLITO NATAL , DEVOTO, PROVINCIA DE CÓRDOBA DONDE LA ORQUESTA DE ''LOS ARIAS'' LO TUVO COMO PRIMER CANTANTE, TE LEO MARTA, TOCAYA, Y ESTE CURIOSO COMPARTIR ME HACE ADEMÁS ADMIRARTE PORQUE LOS SENTIMIENTOS SE VAN HACIA ATRÁS CUANDO MIS VIEJOS, AMBOS, TARAREABAN JUNTOS BALSESITOS EN FIESTAS FAMILIARES. TU POESÍA ME TRAJO ESE HERMOS RECORDAR.LA ESTROFA QUE SIGUE TE DECLARA POETA. CARIÑOSAMENTE. MARTA COMELLI

    ''... Pálida sentencia de una luna
    que nos niega la fortuna
    de entregarse a pleno día.
    Grito cerrado de la entraña,
    juego tan difícil de mentir...''

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  5. Muchas veces me planteo si no es demasiado petulante partir del yo para contar lo que -a mi entender- es lo mejor de dedicarse al arte con cuerpo y alma, y sin resistencia.
    Porque, como diría la entrañable Eladia Blázquez, "... así solamente interpreto la vida.", en conjunto, en el alimento constante, en el esencial complemento humano.
    En este día, leyendo los comentarios tan cariñosos que han dejado -y que agradezco-, siento que se comprende cuál es el lugar desde donde una lo hace.
    Aldao querido, cuando me pediste que escriba sobre mi enamoramiento con el tango para tu bella Artesanías Literarias, hiciste posible el repaso de muchos momentos, de esos que una atesora pero que(será que no me psicoanalizo jiji)en muchos casos no había visto así, tan profundamente.
    Recibo estos comentarios con gran emoción y alegría, y me dan ganas de seguir... qué más!! Besos

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  6. Esta autoentrevista , sos tan vos!!!!!!!!!!, amiga ..sabes lo mucho que te admiro como poeta , y lo que te quiero como persona en mi vida ....se pueden separar ?. no ni ahi.Barrilete sin hilo , pibaaaaaaaaaa. Mirta Nicosia

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  7. Te digo un secreto, aunque creo que te lo conté una vez. Conozco casi todos tus tangos, pero en mis momentos masoquistas-terapéuticos (yo me entiendo)pongo un tango tuyo que no sé por qué, una y otra vez, y otra vez y una vez más, al escucharlo se me pianta un lagrimón de verdad. No es cuento. Quiero emocionarme mallllll, y lo pongo para sentirme biennnnn. Se llama De Gusano a Mariposa, pero solo interpretado por esa voz quebrada de Maby Escribal. Ese tema me puede y lo envié a todos mis amigos, inclusive a Beto Cabrera, a Valencia, España, para que conozca algo de tu obra. Lo que me pasa a mí, le debe de suceder a muchos y seguramente no lo sabes. Es para que lo tengas en cuenta, que lo que hacés con talento, modestia y discresión, hace felíz a muchísima gente. No todo está perdido, ¿verdad Marta? Cacho Lemos

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  8. Mirta... Cacho... En mi cielo terrenal hay más de sol. Lo sabían? Rebesos

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  9. marta, leyendo tu historia descubro la de muchos argentinos, que quisas hoy sientan algún sentimiento de culpa por no saber el horror, al cual eramos arrastrado,toda una juventud que queríamos un país donde todos tubieramos la oportunidad de vivir.Me toco a mi estar entre los que milagrosamente salvamos nuestras vidas y podemos contar esa etapa de horror que vivimos los argentinos.Me fui al carajo solo quería decirte que encontré en tu historia, a una muger llena de ternura y calidez. tal ves no entienda mucho de poemas , pero ellos son lo que vos, un abraso me hemosionaste

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  10. Querida Marta : en cada tema tuyo que reescubro, encuentro tantos retazos de mis vivencias y de tu infancia y la mía... de tu casa y la mía....Será por eso que me emocionan ,cada día mas...y mas me doy cuenta que llega el momento de que nos unamos para ser una voz y un tema a interpretar.Te siento Hermana como a mi misma.Abrazos y cada día te quiero más.Desde Colonia Valdense-Uruguay Lina Pacheco

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  11. Sebastián, no te fuiste al carajo... simplemente dejaste fluir lo que mi escrito provocó en vos. Y para eso siento que escribo, para provocar, para que cada quien lo encuentre sienta que algo se mueve y conmueve. Gracias por tu mensaje. Un beso

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  12. ¡Excelente, Marta, ! ¡¡¡Te refelicito!!! No merecés menos, porque sos una alfarera cultivando Cultura y difundiendo la obra gratuitamente, de todos tus colegas.
    Te abrazo fuerte desde Bariloche:
    YOLANDA ROSAURA RUBÍN

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