martes, 27 de agosto de 2013

Alaíde Foppa (1914 - 1980) Guatemala



Ella se siente a veces...

Ella se siente a veces
como cosa olvidada
en el rincón oscuro de la casa
como fruto devorado adentro
por los pájaros rapaces,
como sombra sin rostro y sin peso.
Su presencia es apenas
vibración leve
en el aire inmóvil.
Siente que la traspasan las miradas
y que se vuelve niebla
entre los torpes brazos
que intentan circundarla.
Quisiera ser siquiera
una naranja jugosa
en la mano de un niño
-no corteza vacía-
una imagen que brilla en el espejo
-no sombra que se esfuma-
y una voz clara
-no pesado silencio-
alguna vez escuchada.



Mujer

Un ser que aún no
Acaba de ser,
No la remota rosa
angelical,
que los poetas cantaron.
No la maldita bruja que
los inquisidores quemaron.
No la temida y deseada
prostituta.
No la madre bendita
no la marchita y burlada
solterona.
No la obligada a ser buena
no la obligada a ser mala.
No la que vive
porque la dejan vivir
no la que debe siempre
decir que si.
Un ser que trata
de saber quién es
y que empieza a existir.


3 comentarios:

  1. Despiertan empatía estos poemas desde la difícil construcción del ser-mujer en todos los tiempos.
    Delicadeza y fortaleza, y el gran desafío: no perder la femineidad.
    No había leído antes a la autora. Felicitaciones.
    MARITA RAGOZZA

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  2. La incompletud de la mujer, la desazón-
    El primero me gustó mucho mas . Gracias por traerla.

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  3. Tal como plantea la poeta guatemalteca '' la mujer humillada'', o esa fue mi sensación al leer estos poemas, y también un dejo de tristeza. Alaíde probablemente haya escrito sobre una época un poco anterior a la actual, donde las mujeres hemos logrado ocupar un lugar de presencia. Buena publicación. gracias. marta comelli

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