JORGE ENRIQUE
RAMPONI
(en Geografía
lírica argentina. Cuatro siglos de poesía XVII – XVIII – XIX – XX. de José
Isaacson) . Buenos Aires, ediciones Corregidor, 2003.
Jorge Enrique Ramponi ha elegido como tema
de su libro esencial la infinita piedra cordillerana, e incorpora a la poesía
argentina el paisaje andino de su Mendoza natal, en la que transcurrieron los
setenta años de su vida.
En un homenaje que se le tributó en su ciudad, poco después de la aparición de su
último libro que viera publicado, Los
límites y el caos, dijimos: “Jorge Enrique Ramponi ha empinado su voz hasta
las mayores alturas logradas en el ámbito de la poesía contemporánea. El
silencio que lo ha rodeado ha sido el recinto más adecuado para percibir la
profundidad y la insólita estatura de su lirismo. Desde 1942, fecha de
aparición de Piedra infinita, los
estudiosos comprometidos con la verdad del texto ya sabían que el nombre de
Ramponi quedaría inseparablemente ligado a la cordillera que, a pesar de su
dura indiferencia, fue la cálida matriz germinal de esos versos que conjugan el
instante del hombre con la eternidad de la piedra”. La poesía ha sido instrumento capaz de
convertirlo en un minero privilegiado, pues no busca otro material que no sea
el de los rostros ocultos y el de los perfiles imprecisos que es menester
rescatar para reconocer la siempre escondida realidad.
José Isaacson
Obra poética: Preludios líricos (1927); Colores
de júbilo (1930); Pulso del clima (1932);
Corazón terrestre (1935); Piedra infinita (1942); Los límites y el caos (1972).
Jorge Enrique Ramponi nació en Mendoza el 21
de agosto de 1907, pasó su vida en su provincia escribiendo poemas hermosos
donde el paisaje, los Andes, son el centro absoluto de su cosmovisión. Murió en
su provincia en 1977.
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Sobre el poema de
Jorge Ranponi: Piedra Infinita
En enriquecedoras
imágenes, el poema Piedra infinita muestra
un “yo lírico” consustanciado en una unidad originaria con el mundo. El poeta busca en la piedra respuestas sobre el misterio de la existencia.
La piedra milenaria se transforma así en oráculo privilegiado, en silencioso
testigo tatuado por las “napas” del tiempo.
Rompí su cuerpo por ver su corazón: témpano
sólo.
Vacié su vaso, arena muerta contenida.
Ella, lo eterno: yo lo efímero ardiente, la
atropello a sangre y canto.
Lo sé: me mira hasta los huesos con mi
lápida,
pero lloro sobre ella, porque algo suyo
llora en mí su destino.
Y es en el silencio de la piedra que el
poeta oye su grito, grito desgarrador, que a modo de espejo, le refleja su
propio destino.
Silencio no es silencio,
es el tremendo vítor de la piedra.
El tiempo y finitud
es el enigma a desentrañar. Pero el canto del poeta, al decir de Jaime
Correas, en su estudio sobre Piedra
infinita: “es el soporte moral del mundo”. El poeta atropella a la piedra a sangre y canto, y el silencio, el
silencio “ es el canto de la piedra”.
Canta, pequeño pastor de unos días y una
sangre
sobre la tierra, nuestra heredera y nuestra
herencia,
Canta, oh deudo, mientras vuelve a la
heredad la dádiva, gota a gota a su
núcleo,
porque es honra del hombre libar lo que su
oscura, última flor contiene,
así madura la equidad del mundo, oh héroe del corazón cantando.
Ofelia Funes
Acertado comentario sobre el poema de Ramponi, Ofelia. Gracias por acercarnos y difundir a este luminoso poeta argentino.CF.
ResponderEliminarInteresante rescate, desconocía al autor, Carlos Arturo Trinelli
ResponderEliminarmUY BUENO EL TEXTO , oFELIA . CREO QUE HAY CIERTO DETERMINISMO DEL PAISAJE , ESTE MARCA LAS CREACIONES DEL AUTOR , ME RECUERDA "LIBRO DE PIEDRA! DE CÉSAR ROSALES , AUTOR INJUSTAMENTE OLVIDADO.
ResponderEliminarGRACIAS Y ABRAZO!
Debo ponderar el rescate de Ramponi y el conocimiento sobre poesía y poetas de Ofelia Funes, que comparte su saber de pintura, poesía y literatura: una guía para profanos y curiosos. Gracias, Ofelia.
ResponderEliminarandrés
No conozco al autor pero me interesa luego de una exposición tan breve pero a su vez tan completa de Ofelia . Muchas gracias
ResponderEliminarCristina Pailos
Fascinante análisis de la poesía de este autor que no he leído.
ResponderEliminarFuertes concepciones a través del signo de la piedra que nos remite al tiempo , al silencio. . . y también al grito.
Gracias, Ofelia y Artesanías por este artículo.
MARITA RAGOZZA
Agradezco los comentarios. Es un verdadero placer compartir con ustedes mis sentimientos y mis lecturas poéticas
EliminarGracias Artesanías por el espacio que nos bindan