EMILIO BALLAGAS
(1908-1954). Poeta cubano. Emilio Ballagas fue uno de los primeros poetas cubanos en contemplar la literatura afrocubana en sus obras. De comienzos vanguardistas pronto cambia su inspiración al tema mulato o negro, dentro del cual se distingue su ternura. Con el transcurso de los años evolucionó a otra etapa poética donde las emociones las demuestra con mayor intensidad lírica, la angustia es intolerable. Ballagas, al igual que muchos de sus compatriotas, se distingue por la claridad y musicalidad de su forma. Creador de profundos sentimientos los cuales se reflejan en su obra. Obtuvo el Premio Nacional de Poesía en 1953. Además de sus varios libros y poemarios colaboró en varias revistas nacionales y extranjeras. Natural de Camagüey se graduó de Doctor de Filosofía y Letras. Se dedicó a la enseñanza de maestros. Viajó por Estados Unidos y Europa, Francia y Portugal. Obra: Júbilo y fuga, 1931, 1939 Cuaderno de poesía negra, 1934 Antología de la poesía negra hispanoamericana, 1935 Elegía sin nombre, 1936 Nocturno y elegía, 1938 Sabor eterno, 1939 La herencia viva de Tagore, 1942 Nuestra Señora del Mar, 1943 Mapa de la poesía negra americana, 1946 Cielos en rehenes, 1951 Décimas por el júbilo martiano en el Centenario del Apóstol José Martí, 1953
Canto para dormir a un negrito
Dórmiti mi nengre,
dórmiti ningrito.
Caimito y merengue,
merengue y caimito.
Dómiti mi nengre,
mi nengre bonito.
¡Diente de merengue,
bemba de caimito!
Cuando tu sia glandi
vá a sé bosiador...
Nengre de mi vida,
nengre de mi amor...
(Mi chiviricoqui,
chiviricocó...
¡Yo gualda pa ti
taja de melón!)
Si no calla bemba
y no limpia moco
le va′ abrí la puetta
a Visente e′ loco.
Si no calle bemba,
te va′ da e′ gran sutto.
Te va′ a llevá e′ loco
dentre su macuto.
Ne la mata ′e güira
te ñama sijú.
Condío en la puetta"
etá e′ tatajú...
Dórmiti mi nengre,
cara ′e bosiador,
nengre de mi vida,
nengre de mi amor.
Mi chiviricoco,
chiviricoquito.
Caimito y merengue,
merengue y caimito.
A′ora yo te acuetta
′la ′maca e papito
y te mese suave...
Du′ce... depasito...
y mata la pugga
y epanta moquito
pa que droma bien
mi nengre bonito...
dórmiti ningrito.
Caimito y merengue,
merengue y caimito.
Dómiti mi nengre,
mi nengre bonito.
¡Diente de merengue,
bemba de caimito!
Cuando tu sia glandi
vá a sé bosiador...
Nengre de mi vida,
nengre de mi amor...
(Mi chiviricoqui,
chiviricocó...
¡Yo gualda pa ti
taja de melón!)
Si no calla bemba
y no limpia moco
le va′ abrí la puetta
a Visente e′ loco.
Si no calle bemba,
te va′ da e′ gran sutto.
Te va′ a llevá e′ loco
dentre su macuto.
Ne la mata ′e güira
te ñama sijú.
Condío en la puetta"
etá e′ tatajú...
Dórmiti mi nengre,
cara ′e bosiador,
nengre de mi vida,
nengre de mi amor.
Mi chiviricoco,
chiviricoquito.
Caimito y merengue,
merengue y caimito.
A′ora yo te acuetta
′la ′maca e papito
y te mese suave...
Du′ce... depasito...
y mata la pugga
y epanta moquito
pa que droma bien
mi nengre bonito...
Nocturno
¿Cómo te llamas, noche de esta noche?
Dime tu nombre. Déjame
Tu santo y seña
Para que yo te reconozca
Siempre
A través de otras noches diferentes.
Tú me ofreces su frente en medialuna
(Medialuna de carne),
Sus labios (pulpa en sombra)
Y su perfil al tacto…
(Mañana mi derecha
Jugará a dibujar su contorno en el aire.)
¿Cómo te llamas, noche de esta noche?
Dime tu nombre, déjame
Tu santo y seña
Para que yo te reconozca
Siempre
A través de otras noches diferentes.
¡Y que pueda llamarte gozoso,
Trémulo,
Por tu nombre!
¿Cómo te llamas, noche de esta noche?
Dime tu nombre. Déjame
Tu santo y seña
Para que yo te reconozca
Siempre
A través de otras noches diferentes.
Tú me ofreces su frente en medialuna
(Medialuna de carne),
Sus labios (pulpa en sombra)
Y su perfil al tacto…
(Mañana mi derecha
Jugará a dibujar su contorno en el aire.)
¿Cómo te llamas, noche de esta noche?
Dime tu nombre, déjame
Tu santo y seña
Para que yo te reconozca
Siempre
A través de otras noches diferentes.
¡Y que pueda llamarte gozoso,
Trémulo,
Por tu nombre!
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Me gustó el nocturno.
ResponderEliminarMaría Esther Martinez
Me dio gracia el comentario de Maria Esther. Lo que pasa es que Nocturno es otro tipo de poema. El primero me hizo acordar a las canciones de cuna que muchos autores latinoamericanos escribieron como forma de brindarse al pueblo y a su sentir , y que incluso fueron luego canción, como alguna de Nicolás Guillén o Luis Palés Matos con su Calabó y bambú. Bambú y Calabó. El gran Cocoroco dice: tu-cu-tú, La gran Cocoroca dice, to-co-tó.. Ese tipo de diversidad, sólo un lujo de grandes.
ResponderEliminarLily Chavez
ESE PRIMER POEMA LO RECUERDO PERFECTAMENTE SIN SABER QUE PERTENECIA AL AUTOR,DORMITI MI NENGRE, NENGRE DE MI VIDA, NEGRE DE MI AMOR. CONOCIDÍSIMO. GRACIAS POR TRAERME ESE TEXTO NOSTALGIOSO. EL SEGUNDO, ES DONDE EL POETA DEJA SU PALABRA MÁS ASENTADA PERO SIN PERDER SU ESTILO.
ResponderEliminarEDGAR BUSTOS
Es muy conocido el primero, suena a canción de cuna, alguna vez la he cantado o tarareado mejor. Bueno, pero sigo pensando que hay magia en las poetas cubanas que la revista nos ha acercado.
ResponderEliminarIrene
Los dos me gustaron, no conocía al autor.
ResponderEliminarAndrea Casas
Relamente,me hacen llegar poetas, que podemos interpretar cada linea de sus poemas, canciones de cuna
ResponderEliminarUn abrazo
Marite
El primer poema tiene el lenguaje y ritmo de una canción infantil. Y el segundo tiene imágenes insólitas.
ResponderEliminarMARITA RAGOZZA