miércoles, 20 de febrero de 2013

Cristina Villanueva



 
Placeres textuales

El sabor del texto

Lo que no se puede decir, perdido o inventado, busca , sondea la memoria. Siempre es  con otros la comida,  recuerdos de mesas, fiestas  o miradas.

 Desde esos animales expulsados de los árboles que fuimos,  pasaron  miles de años, infinitos casi, de tantos miles incontables, hasta el fuego  y el alimento entre las llamas.El alimento y la palabra en el círculo que ampara.El alimento, la palabra, el beso, donando a la boca   su sentido. El alimento que no es el que tuvimos entre los labios, al menos no es sólo ese, es también encontrar entre las hojas verdes, las  hojas de los  libros que cuentan colores y aromas que nunca  probarmos. El barco que vino trayendo abuelos con sus recetas paisajes Sicilia tanto mar y azahares, desborde y España con un chocolate espeso, oscuro de lejanos  cumpleaños.   El mundo abierto en las costumbres  de otras casas, otros paises.La eternidad y el paraiso perdidos por una fruta.

El cielo que buscamos, a lo mejor sin saberlo en los bocados. 


Placeres del lenguaje


Palabra delicia, 

                     señuelo,

sostenida en los bordes,

                tiembla



Es sólo un  beso en la nuca de la página.



Receta a inventar

Una bocanada de gracia sobre la asfixia, el desierto, el desgarro.


Andanada de la boca abierta a la vida, buscando los hilos deshechos por el tóxico o  desintegrados  `en la anemia

para tejer  un tapiz sobre el horror - agujero.


¿será el telar la vida ?

¿ y la alegría que surge de
amansar el dolor 

  el arte  ?

9 comentarios:

  1. Muy buenos Cristina !! Placeres de tu lenguaje!!
    Abrazo y gracias!!

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  2. Como antes, como siempre, tus poemas tienen un sello ligado fuertemente a los sentidos. Un beso, Lina

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  3. Tu bellísimo primer texto me hizo acordar a este poema de mi libro Comensales... Fabiana León
    III
    Dibuja con el dedo
    un espiral sobre el plato
    de tanto circular
    las yemas
    se entibian

    cuando cierra los ojos
    huele el guiso
    que hacía su madre.
    frota otra vez
    el mandala cotidiano
    donde ella vuelve
    vuelve
    siempre vuelve.

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  4. Metáforas certeras como flechazos. Lo disfruté mucho

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  5. Bienvenida, Cris, con tu pluma tan envuelta en expresión y belleza poética.
    andrés

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  6. Cris, todo este texto casi culinario ya que la boca es corolario de sensaciones que la piel recibe a través de tu letra, nos arroja hacia el quid del placer de tu lenguaje hecho arte.
    Un abrazo
    Celmiro Koryto

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  7. Muchas gracias a todos amigos y al que me publicó.Recién llego de Ecuador y me encuentro con los cálidos mensajes,. luego la sigo.

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  8. Cristina,
    Muy buenos ambos textos, que llaman a gozar la vida no sólo con el espíritu sino con todos los sentidos. Proponés una suerte de hedonismo vital y cargado de emotividad y amor por la belleza. ¡Felicitaciones!
    Germán

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    1. LOS FELICITsON O A TODOS POR cRISTINA LOS MENSAJES

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