GIANNI SICCARDI |
GIANNI SICCARDI
La soledad habitada
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Tarde de verano
¿Está fuera de sus cuerpos?
Llevan sus ojos fijos en sus pantallas
en la arbitrariedad de sus fantásticos guiones
con los millones de impresiones y diálogos
y cálculos y planes instantáneos
y viajes misteriosos
hacia países y siglos inexistentes
y ráfagas de miedo
de vergüenza y orgullo
y las iluminaciones repentinas
y los desasosiegos
y las miradas de horas perdidas y olvidadas
y el golpe exacto en el mentón del adversario
y los minúsculos tentáculos
del veneno semanal
con los ojos esterilizados
por el fermento de los pequeños odios inútiles
y la veloz respuesta precisa
y el agua contaminada de los remordirnientos
y los naufragios imperceptibles
y las excusas y los malentendidos
arrojados al viento.
¿Serán menos que nada en este instante?
¿Más que error?
¿Se sabe por qué ninguno se agacha para recoger las
migajas de esta tarde
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esta tarde de verano como otras
que transcurre majestuosamente?
No.
No se sabe.
No se sabe por qué.
IX
Y nadie hace caso
ni queda perplejo o admirado
por el ciego con sus anteojos negros
para ver de cerca
(¿y si fueran azules o blancos?)
que jamás pisa los charcos
ni vacila
ni tropieza por las baldosas rotas
sino que avanza siempre
concentrado en su trabajo
dirigiendo con su infalible bastón blanco
(¿y si fuera rojo o verde o arnarillo?)
la sinfonía de la calle
y se sobresalta y detiene la orquesta
a la más pequeña desafinación o desajuste.
No se sabe por qué
nadie queda sorprendido o pensativo
Tarde de verano
Una tarde de verano el poeta transita por las calles de la ciudad,y se interroga por sentido de la existencia. Camina y observa que la gente no ve,que sólo percibe su propia inmediatez.El único que ve es el hombre ciego, que no sabe de que color son las baldosas, pero jamás pisa los charcos, ni tropieza con las baldosas rotas.La frase "no se sabe porque" articula todo el poema "Tarde de verano",del que aquí sólo se muestra un fragmento.
ResponderEliminarEl ciego es el que ve, como el poeta, que atraviesa la cotidianidad tanteando con su bastón blanco.
Extrañeza, y dolor en aquel que percibe el sin sentido, que interroga, y no obtiene respuestas.
Gracias Artesanias
Ofelia
Preguntas existenciales que toman vuelo en las letras de este autor y que aqui cuestionan la ceguera que tenemos ante lo que le sucede al otro , y la indiferencia de lo que nos rodea:
ResponderEliminar"¿Se sabe por qué ninguno se agacha para recoger las
migajas de esta tarde. . ."
Quizás para el poeta escribir sea la respuesta.
MARITA RAGOZZA
Con su poética, siempre, en la yema de los dedos y su ojo avizor capturando la vida que resplandece a su paso; al paso de cada hombre. La vida que se ofrece como una fruta sabrosa...para el que la quiera degustar. Gianni eternamente presente en el corazón de la vida. Susana Macció
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