lunes, 14 de mayo de 2012

VIAJES: Barcelona Mon Amour



Desde izq. Sañoram;Claudia; la Sueca; Adrián; la Mann y el viejo Aldao
VIAJES: Barcelona Mon Amour

por Andrés Aldao

La visita a Barcelona  no tuvo ribetes  turísticos ni inquietudes arquitectónicas. Fue para nosotros una escapada a la urbe que refleja cultura y rebeldía en estos días de gobierno falangista, del pepeísmo de los ajustes, del capitalismo salvaje, de los ramalazos fascistas de Rajoy y sus turiferarios.
Pues el avión aterrizó; y allí estaba la cabeza pelopincha de Ernesto Ramírez, el poeta de Sañoram, resaltando por encima de quienes esperaban a los viajeros. Y desde allí partimos al refugio de la calle Provenza en el centro barcelonés, a dos cuadras de la atracción para turistas y beatos La Sagrada Familia, que es actualmente uno de los monumentos más visitados de España .

El jamón serrano, el cantimpalo, el salame y el queso de la región renovaron nuestras fuerzas y nos colmaron de placeres sibaritas junto al vino tinto, la cerveza San Miguel y los guisquis selectos de la bodega Ramiriana. Luego de la noche en vela que anticipó nuestro vuelo a la capital de Cataluña, el banquete fue una congratulada recompensa a nuestro cansancio peregrino.

Compartimos detalles de nuestras vidas recientes distanciadas por el mar Mediterráneo, las crisis de cada país (Israel con sus dones de apartheid y España con la benevolencia del ajuste merkeliano). Y celebramos el reencuentro y la amistad evocando los días compartidos con Ernesto en Israel.

Ni Parque Güell, ni la arquitectura de Gaudí, ni lugares históricos eran nuestra preocupación (ésta era nuestra quinta visita): fuimos a recorrer calles, ver a los barceloneces en su salsa, y en sus tascas,  y visitar a una de sus librerías más importantes, La Central, donde nos aprovisionamos de excelentes libros Y lamentándonos por los muchos que no adquiriríamos...

Un par de noches nos encontramos con los fratellos de Ramírez (parte esencial del rito catalán), Miguel y Claudia y Adrián y Helga (la Sueca), celebramos, brindamos y compartimos una frondosa picada. En la segunda velada disfrutamos la cazuela de mariscos preparada con receta  maroñense y esmero charrúa. La tarde anterior a nuestro retorno visitamos el Parque de los Laberintos. Ante el temor de extraviarnos y no hallar la salida renunciamos a la aventura y nos consagramos a respirar el aire puro del lugar. Ya de regreso, la postrera picada, las últimas copas de vino y latas espumantes de cerveza.

Después, al dia siguiente,  la despedida... Nos abrazamos con Ernesto al pie del autobús que nos llevaría al Aeropuerto... El retorno a la nefasta rutina del estado de Israel, a sus colonos que como deporte predilecto talan olivos y roban nuevas tierras a los palestinos. Regreso a la prepotencia, la mentira y la violencia. Descubrimos entonces que los nueve días en Barcelona habían sido una suerte de Arcadia catalana, unos tranquilos días de sosiego pastoral ajenos a los ritos de violencia de la única democracia del medio Oriente...Y ya de regreso nos enteramos que los indignados barceloneses y los indignados israelíes, los del M 15 en la Puerta del Sol y millares de ciudadanos del mundo se habían reunido en las plazas con los puños en alto y con sus cantos de protesta para recordarles a los potentados políticos y financieros que el bienestar, la justicia y la libertad en el mundo son para todos...  

8 comentarios:

  1. Crónica de un viaje que significó un oasis entre amigos y buena mesa,para que descansen nuestras indignaciones y, al regresar a la rutina, sepamos que no lo soñamos, sino que fue vivido.
    Andrés i Esther, els meus amors. . .
    MARITA RAGOZZA

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  2. Se los ve muy bien en la foto, el poeta de sañorams con un peluche en brazos y las copas con contenido, me alegro del recreo y bienvenidos, un abrazo, Carlos Arturo Trinelli

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    1. Trinelli, el "peluche en brazos de Sañoram" es el perro mascota de Adrián Ramírez, integrante del Clan Barcelonés de Maroñas...
      andrés

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  3. Gracias por los comentarios... Me olvidé de resaltar que llegamos el 1º de Mayo y al arribo del autobús que nos transportó hasta la Plaza España había aún manifestantes que habían participado de la concentración del 1º de Mayo. En Cataluña no viven en la jauja: allí sería imposible cortar olivos y robar tierras..
    Andrés

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  4. Un paseo encantador. Felicito el impulso de viajar, ver, vivir también lo otro... Me parece que de este viaje deseo una crónica más extensa; con rostros, charlas y sentires de ocacionales encuentros...

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  5. Me hubiese gustado ser parte de la reunión y compartir vivencias se los ve a todos sosegados por la copa y la buena cocina que hace fluir el diálogo y afianza la amistad.
    Un saludo a aquellos en la distancia y de bienvenida a los mentores de la revista que nunca duerme aún cuando duerme.

    Con cariño.

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  6. Ester, Andrés, amigos de esta distancia que achico día a día en un sueño ya casi imposible para mí. A Israel ¿cómo? y a Barcelona, con parientes casi diría presentes ausentes. De ésos de los que me dicen algunos,todos,uf con los catalanes, duros, malos y amarretes. Y aunque me lo digan, qué me importa. Con gusto pasearía por sus calles y orgullosa hubiera estar sentada junto a ese hermoso grupo, invisible, achicadita, escuchándolos en silencio. No fuera a ser que se me escapara algo. Me alegro de ese respiro tomado. Que hayan gozado del 1º de mayo y como siempre leo y disfruto de la lectura que me trae reminiscencias, nombres, lugares olvidados y nuevos aprendizajes. Un abrazo estrecho a la pareja de "la Mann y el Aldao". Y nada de viejo, que cuando el mayo próximo cumpla los 80 estaré más cerca suyo y con Ester nos dejaremos ganar una carrera. Ester es más joven y hará un esfuerzo para quedarse atrás. Felicidades para ambos. Fuerza. Sonia

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  7. con aplacado placer he leído el relato de la parte Catalana de vuestro reciente viaje, casi a modo de grumete polizón (que no dejó a un lado su sensualidad de gourmet).
    hoy lejos de Barcelona, viví allí por años y nunca me iré, por ello agradezco este ojo de buey abierto en Artesanías donde en tono coloquial propio de aquél encuentro, Andrés no deja de lado decir bien lo que piensa y siente, sin ambages, con los que coincido en sustancia.
    una agradable referencia es la foto de aquel encuentro, donde se le refiere como “el viejo Aldao”, y quiero agregar una expresión, que por lo que hace y dice más que viejo -es un grande!-
    Julio Taborda Vocos

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