Retienen a un palestino
nominado al Oscar al llegar al aeropuerto de Los Ángeles
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Las autoridades encontraron sospechoso el
motivo de su viaje a EEUU
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Para salir en libertad, tuvo que recurrir a su
amigo Michael Moore
Pablo Scarpellini | Los Ángeles
Se
haga o no con el Oscar, Emad Burnat ya tiene una anécdota poderosa que contar.
No fue un trago agradable en el que se vio envuelto el responsable del
documental 'Five Broken Cameras', nominado a un Oscar en esa
categoría y que a punto estuvo de perderse la ceremonia del domingo, amenazado
con ser deportado nada más llegar al aeropuerto de Los Ángeles.
Al
parecer, las autoridades de inmigración encontraron sospechosos los motivos del
viaje del palestino a Estados Unidos y lo retuvieron en una sala durante hora y
media junto a su mujer y su hijo, sin que la invitación de la Academia de Hollywood
para acceder al Dolby Theater les pareciera suficiente prueba.
Burnat,
un campesino que documentó la lucha contra el ejército israelí por la
construcción de un muro en Cisjordania, tuvo que recurrir a sus
influencias en Hollywood para poder salir del problema. Al verse
atrapado, contactó al cineasta Michael Moore, a quien conoció durante el
proceso de promoción de su trabajo.
"Aparentemente
las autoridades de inmigración no pudieron entender cómo un palestino podía
estar nominado a un Oscar", dijo Moore a través de su página de Facebook.
"Llamé a oficiales de la
Academia que a su vez contactaron a abogados. Le dije a Emad
que les diera ni número a los oficiales y que soltara ni nombre un par de
veces", relató el responsable de 'Bowling for Columbine'.
Eso
ayudó a que le soltaran una hora y media más tarde y que le acabaran dando el
tradicional mensaje caluroso previo a la entrada a Estados Unidos: "Welcome
to America".
No
es una situación extraña para un Burnat acostumbrado a las dificultades a la
hora de cruzar fronteras por ser palestino. Su documental, de hecho, refleja la
marginación en la que viven muchos de sus compatriotas, sometidos por la
situación que se vive en la Ribera Occidental y en la Franja de Gaza.
Luego de leer este artículo busqué en internet información sobre el documental filmado por el cineasta palestino Emad Burnat. Encontré el video "Five Broken Cameras". Al ver las imágenes no pude menos que pensar en el poder de la imagen como testimonio de la memoria de los pueblos. Una imagen enmarcada y captada por un artista, tiene una carga de significados mayor que una simple escritura informativa, que el mejor discurso político.
ResponderEliminarCon razón en el film Emad cuenta que, seguirá filmando porque es lo que le da sentido a su vida.
Gracias Artesanías
Los EEUU consideran que entrar a su fabuloso país, ejercitado como los mejores en las lides bélicas es considerado como un honor. Es bien cierto que es un país potencia, es bien cierto que es pionero en la industria cinematográfica, como en cantidad de hechos es ultra magnífico. Pero también es bien cierto que se aroga privilegios humillantes y día a día se está revelando a aquellos que no sufrimos el sindrome "norteamericano", como una nación a la que no va a interesarle al mundo, tanto como con su autobombo se ha publicitado. Con o sin esa potencia actual, el cineasta palestino Emad Burnat seguirá siendo un gran artista. El tema será que "ese otro mundo" deje de mirar con ojos encandilados al nocivo polo de atracción y destrucción. GRACIAS POR ESTAR Y PERMITIR - Sonia
ResponderEliminarBurnat, como otros palestinos, pertenece a un pueblo que es víctima de sus propios líderes, que legitiman el uso del terrorismo como medio para lograr sus anhelos políticos. No es tanto de extrañar que despierten desconfianza en cualquier país democrático. En cuanto a la ¨situación que se vive en la Ribera Occidental y en la Franja de Gaza¨, yo creo que las fabulosas sumas de dinero que los palestinos reciben de los emiratos alcanzarían para solucionar los problemas económicos de cada uno de sus ciudadanos, pero parece que ese dinero no llega a ellos.
ResponderEliminarSeñor José María, el problema palestino no obedece a que los dineros que reciben como ayuda no llega a los palestinos sino a la bota del estado de Israel que ocupa Judea y Samaria desde el año 1967 violando leyes de las Naciones Unidas que condenan la ocupación y la apropiación de tierras por colonos de esa país. Si no se sabe no se opina-
EliminarJosé Luis Lubertino
Señor Andrade: no pensaba intervenir en la discusión sobre el problema palestino. Tengo una profusa cantidad de textos sobre esta contienda pero dado que encontré algunas inexactitudes en su nota voy poner las cosas en su lugar:
ResponderEliminar1) En 1947 los palestinos no tenían su dirigencia propia, mal podían haber aceptado o rechazado el acuerdo propuesto por la ONU;
2) En 1967 la señora Golda Meier, primer ministro de Israel, se negó a devolver la tierra conquistada aduciendo "¿Palestina, palestinos? ¿qué es eso...? Desde esa conquista, en lugar de sentarse a negociar los israelíes se dedicaron a colonizar, ocupar tierras, despojar de bienes a los palestinos, a degradarlos, a humillarlos, a irrumpir en sus viviendas por las noches, destrozar sus bienes y detener a la gente joven. El dirigente Abu Mazen ha intentado participar de negociaciones en igualdad de condiciones pero siempre los israelíes han impuesto condiciones previas. No es por casualidad que la ONU, los países europeos agrupados en la CE denuncian a las construcciones viviendas en territorio que pertenece a palestinos, las vallas humillantes, las medidas draconianas y los autobuses especiales por rutas separadas para palestinos que viajan de la zona ocupada por el ejército israelí hacia Tel Aviv mientras los israelíes viajan en los autobuses generales en los que no se permite viajar a palestinos. Si usted señor Andrade realmente vive en Jerusalén, pues es indudable que vive usted recluido en su casa o embajada o refugio subterráneo. Con cuentos e invenciones no reflejamos un país donde impera el racismo y el apartheid desde 1967... Y eso que desde más de diez años que no pisa un soldado israelí, es verdad a medias, no pisa un solo soldado sino batallones élite israelíes y aviones que bombardean la franja sin necesidad de "pisar" el territorio: las bombas de racimo son muy eficientes desde el aire como la artillería y los tanque por tierra.