LEONARD COHEN |
poemas
El primer asesinato
Supe que no había ocurrido
No había asesinato en la pradera
La hierba no estaba roja
La hierba era verde
Supe que no había ocurrido
He llegado a casa cansado
Mis botas están veteadas de suciedad
Para qué sirve predicar
nunca les pasó nada
a los cuerpos asesinados en la pradera
Decid la verdad he fumado hasta
llegar al amor en esta noche inocente
Jamás ocurrió
Jamás ocurrió
No hubo asesinatos en la pradera
Había una casa en la pradera
La pradera en sí era grande y estaba vacía
Era de noche
Era noche cerrada
Había luces en las diminutas ventanas.
Supe que no había ocurrido
No había asesinato en la pradera
La hierba no estaba roja
La hierba era verde
Supe que no había ocurrido
He llegado a casa cansado
Mis botas están veteadas de suciedad
Para qué sirve predicar
nunca les pasó nada
a los cuerpos asesinados en la pradera
Decid la verdad he fumado hasta
llegar al amor en esta noche inocente
Jamás ocurrió
Jamás ocurrió
No hubo asesinatos en la pradera
Había una casa en la pradera
La pradera en sí era grande y estaba vacía
Era de noche
Era noche cerrada
Había luces en las diminutas ventanas.
: : :
Esperando a Marianne
He perdido un teléfono
que olía a ti
Vivo junto a la radio
todas las emisoras a la vez
pero capto una nana polaca
la capto entre la estática
se desvanece yo espero mantengo el ritmo
viene de vuelta casi dormida
Acaso tomaste el teléfono
sabiendo que yo lo olfatearía inmoderadamente
tal vez hasta que calentaría el plástico
para recoger hasta la última migaja de tu respiración
y si no piensas volver
cómo ibas a telefonear para decirme
que no piensas volver
para así por lo menos
Poder discutir contigo
: : :
Qué hago aquí
No sé si el mundo ha mentido
Yo he mentido
Yo no sé si el mundo ha conspirado contra el amor
Yo he conspirado contra el amor
El clima de tortura no constituye ningún consuelo
Yo he torturado
Aunque no hubiera existido la nube en forma de hongo
habría odiado
Escuchadme
Yo habría hecho las mismas cosas
aunque no existiera la muerte
Me niego a que se me sujete como a un borracho
bajo el frío grifo de los hechos
Yo rechazo la coartada universal
Como un ninfomaníaco que ata a un millar
en una extraña hermandad
Yo espero
a que cada uno de vosotros confiese
No sé si el mundo ha mentido
Yo he mentido
Yo no sé si el mundo ha conspirado contra el amor
Yo he conspirado contra el amor
El clima de tortura no constituye ningún consuelo
Yo he torturado
Aunque no hubiera existido la nube en forma de hongo
habría odiado
Escuchadme
Yo habría hecho las mismas cosas
aunque no existiera la muerte
Me niego a que se me sujete como a un borracho
bajo el frío grifo de los hechos
Yo rechazo la coartada universal
Como un ninfomaníaco que ata a un millar
en una extraña hermandad
Yo espero
a que cada uno de vosotros confiese
Es una maravilla poder releer a Cohen , su literatura siempre deja una enseñanza, refleja parte de su vida.
ResponderEliminarMe encantó.
amelia
Un hecho es escucharlo pero leerlo es profundizar su filosofía de la vida.Y he aquí entre un asesinato espera a Marianne y se pregunta qué hace aquí esperando que alguien lo confiese.
ResponderEliminarMe gusto y gusta mucho-
" He perdido un teléfono que olía a ti. . ." Me desmayo y me vuelvo a levantar en esta lírica tan simple y expresiva.Sus canciones también me causan esa impresión. Fue monje budista cuando era joven.
ResponderEliminarMARITA RAGOZZA