Carlos Aprea
"abrigo, poesía
1999/2006", Ediciones Al Margen, 2006. “Política líquida y otros poemas”, Sobre
plaquetas de la talita dorada, 2009. “La
camisa hawaiana”, Libros de la talita dorada, 2010. Antologías: "8 poetas regionales",
Concurso EDELAP de poesía (2° premio), La Plata ,1997 "Posía
36 autores", La
Comuna Ediciones , Municipalidad de La Plata , 1998 “Pan, amor y poesía – Culturas alimentarias
argentinas”, INTA, 2008 Poemas y textos diversos han aparecido en las
revistas: “Talita”, “El hormiguero”, “El
espiniyo”, “Pasajes”, “Revista de la
F.C .A.yF.”(UNLP), “Sismo Trapisonda”, etc
para hacer
infinito el amor
cuando la canción se
despereza ya partí,
entonces ella
es la que me
persigue.
(inédito, 1979)
también vivimos
de recuerdos,
de evocaciones,
también vivimos
en la playa desolada,
desguarnecidos,
llamando inútilmente
en la tempestad,
también vivimos
la marea baja lenta
y se vislumbran
manchas,
basuras,
restos
sobre la playa,
caminamos
sobre la anatomía
descuartizada
de la derrota,
aún son tenues los
llamados,
tenues y temerosos,
un horizonte en
brumas,
así
también vivimos
entre ceremonias de
exhumación
y primaveras
esta nueva estación
y sus milagros
de horas dilatadas,
de reencuentros,
de homenajes tardíos
y delirios,
del sabor amargo de
la nada
y el hambre
de lo imposible,
y la fe y los
rencores,
también vivimos.
(de la intemperie, Editorial Al Margen, 1999)
los perdedores
gozosa herida,
insistencia absurda de golpearse y golpearse
con la misma miseria los oídos,
noble madera carcomida, herrumbre de los
años,
persistencia,
canción cortada por el hacha de un carnicero
viva en sus pedazos,
crece en tiempo de descuento,
cuando la edad comienza a ser una amenaza,
crece
una música tatuada en las entrañas,
para que la clasifiquen los imbéciles
y le teman los traidores,
y los asesinos sepan que nunca descansarán
y aunque sea
les sirva de
condena,
no hay llanto tan feroz,
ni dolor tanto,
melodía embrujada que nos arrimas al borde
aquel
de la derrota,
y nos empujas seductora a ese otro lado donde
todo calla
para siempre,
quizá no fuimos fieles a patrones o ejemplos,
quizá el azar marcó de canto una baraja mala
y nos dejo sin falta ni resto,
o tal vez temblamos mas de lo que el tiempo
exige
a los verdaderos triunfadores,
y perdimos el fiel, el equilibrio, la mesura,
el cinismo de los escaladores,
y la alegría de los exitosos sin culpa y sin
memoria,
pero aun nos conmueve
una “esperanza absurda , que es toda la
fortuna...”,
melodía embrujada,
sirenita,
te reís de nosotros que no queremos cera en
los oídos,
aunque tu canto convoque los dolores mas hondos,
y persistimos en hacer el viaje
atados al palo mayor,
sin brújula ni timón, sin cartas ni
astrolabios,
sin marea ni mar,
despidiendo a los muertos que mueren todavía,
sin llegar a saber
si la nave parte, si sube la marea,
atados al palo mayor, de una nave varada y descompuesta,
no hay otra cosa que sea tan inútil
no hay otra cosa que nos importe tanto.
(de la intemperie, Editorial
Al Margen)
El desamparo existencial, la búsqueda de sentido y la denuncia inesperada trajinan las palabras de estos poemas, enfrentándonos a la verdad irrebatible.
ResponderEliminarUna forma positiva de remar ante la indefensión.
Excelentes.
MARITA RAGOZZA
Las mareas, la bruma , el mar , que maravilla ...y yo tan lejos.
ResponderEliminarUn canto , un lamento , un grito .
Muchas gracias.
amelia