EL SECRETO
No sé por qué pero el silencio estuvo
metiéndose en mis ojos y caía
igual a alguna herida la llovizna,
la que muy lejos cae, en mis pestañas.
Extraña forma de morir aquella.
Y en el jardín los lirios se contaban
con voz de viento y hierba las historias
de otras muertes mías. Los espectros
de rosas insepultas consultaban
en torno a mis insomnios. No sabían
que yo busqué el secreto de la vida
y Dios en su belleza noche a noche.
Aquel perfume suyo fue la infame
respuesta a mis preguntas dolorosas.
¡Señor, hoy brotan rosas sin embargo
de la fangosa tierra de mis dudas!
DELFINA ACOSTA
metiéndose en mis ojos y caía
igual a alguna herida la llovizna,
la que muy lejos cae, en mis pestañas.
Extraña forma de morir aquella.
Y en el jardín los lirios se contaban
con voz de viento y hierba las historias
de otras muertes mías. Los espectros
de rosas insepultas consultaban
en torno a mis insomnios. No sabían
que yo busqué el secreto de la vida
y Dios en su belleza noche a noche.
Aquel perfume suyo fue la infame
respuesta a mis preguntas dolorosas.
¡Señor, hoy brotan rosas sin embargo
de la fangosa tierra de mis dudas!
DELFINA ACOSTA
En el secreto de las dudas reside el perfume de esas rosas que florecen hacia adentro y lastiman con sus espinas...
ResponderEliminarCelmiro Koryto
HOLA DELFINA, LOS DOS ÚLTIMOS VERSOS DE TU POEMA-PREGUNTA, DAN UN CIERRE PERFECTO AL DESARROLLO.
ResponderEliminar''Y en el jardín los lirios se contaban
con voz de viento y hierba las historias
de otras muertes mías.'',
E IMÁGENES COMO ESTA LO ILUMINAN. BELLO. FELICITACIONES. MARTA COMELLI