LIMA ANTIGUA |
la patria de la memoria
no tiene fronteras
avanza y retrocede
sombra en el cuerpo
algo de ella regresó
y estoy de vuelta
algo de ella se perdió para siempre
y estoy huyendo
mientras el verdugo, en silencio,
observa
* * * * *
usar la palabra
como quien echa a volar un pájaro
nombrar desde tan lejos
que la voz se pulverice
y sea sólo rescate del olvido
el hueco donde habita
insomne
la memoria
el hombre del sombrero
a mi padre
para saludar tocaba con la punta de los dedos su sombrero
y sonreía al mundo
mi corazón se desplegaba en el aire
cuando doblaba la esquina por la calle Gorriti
y la calle Gorriti era entonces inmensa
una fiesta
entonces mis sueños eran una fiesta
y verlo avanzar era completar el mundo
oler los bordes del aroma familiar
el hombre del sombrero rozaba con sus dedos el mundo
y sonreía
rozaba mi corazón con sus dedos
y sonreía
el mundo era perfecto.
* * * * *
extraña
a Lima, inolvidable
era una vieja ciudad que se alzaba junto al mar
sus callejas virreynales
espesaban la neblina
en las noches volvían como un grito
tan extraños los espejos
fantasmales
entonces, lentamente,
escondía la memoria
un secreto debajo de la almohada
Martha Goldín
Entre la nostalgia, el recuerdo, lo perdido y el exilio: la poesía de Martha es una reflexión dolorosa, la evocación de los crímenes, de sus consecuencias, una poesía sin gritos, sin ruidos inútiles. Llegarán los comentarios, porque treinta mil personas desaparecidas y miles de asesinos que viven en impunidad no pueden pasar de largo. ¡pobre de nosotros si ya viviéramos en paz!
ResponderEliminarSuave y trista, Martha.
Las palabras calmas y esenciales revelan , como en voz baja, profundos sentimientos de luces y sombras.Cuando los sueños eran una fiesta, el barrio, la ciudad, lo familiar eran una fiesta a la cual ya no se puede regresar, pero dejó la fuerza para sobrevivir cuando se asomó el verdugo o cuando hubo que huir y hasta para amar otras ciudades, otros pueblos, a pesar del dolor.
ResponderEliminarLa poesía dice mucho porque es sentida. No necesita estridencias
Cristina
Con la filosa suavidad de su poesía nos delata el exilio más íntimo y el aroma del recuerdo de una niñez feliz junto al gesto imborrable de padre.
ResponderEliminarCelmiro Koryto
La patria de la memoria, nos remite , según Rilke, a "la patria de la infancia ", es verdad , no se agota , nunca. Me gustó.
ResponderEliminaramelia
implicante.
ResponderEliminarsiento torpes las manos tratando de meter en este cuadro, los círculos que se agitan excitados tras la lectura.
exilio y recuerdos íntimos...
el juego dramático de la vida, a veces en mano las cartas perfectas, las ganadoras, luego cambia la euforia por el miedo, la derrota,...desazón.
lo infame, es quien decide robarlas de tus manos, quien brutal, se arroga esa potestad
y destruye la fiesta de tus sueños.
Martha
tus poemas me envolvieron, se adhirieron como gigante pétalo de un lirio, se fundieron en mi interior embriagándome en tus sentires.
Julio Taborda Vocos