MARTHA GOLDÍN
a veces esa ola ola azul y setentista
me abandona en medio de la calle
para asumir otros riesgos
mientras celebro el solcito en la vereda ,
y el hecho de estar viva
ella intenta despertar
el corazón de los incrédulos
para empecinada recordarles
que tener alas
es posible
º º º º º
condenada a vivir entre palabras
apenas la luna llama
vuela
en el ir y venir de la noche
que acompaña este momento
en el que sólo puede esperar
entonces los muertos
su memoria
siempre
qué peligrosas las palabras
hermano
qué peligrosas
Martha Goldín
Qué peligrosas las palabras, claro, tienen filo, no perdonan, trascienden y ejercen poder para derrumbar o también para ensalzar.
ResponderEliminarTambién por la palabra se puede morir, pero poetas como Martha, corren el riesgo.
MARITA RAGOZZA
El final del segundo poema es muy bueno, aunque no siempre sean peligrosas las palabras.
ResponderEliminarAndrea Casas
Leer la poesía de Martha es como sumergirse «a veces esa ola ola azul y setentista»... Yo creo que la poeta no a veces, sino siempre, sin falta, vive, bucea, respira, escribe y se reinserta en esa ola setentista.
ResponderEliminarMartha, como muchos de nosotros, no nos DISFRAZAMOS de Exilados y escribimos poemas para las madres y las abuelas, para los caídos mientras que ellas, las disfrazadas, fantasean una militancia inxistente, un exilio disfrazado.
Martha Goldin estuvo exiliada 12 años. Para ella la palabra tuvo y tiene un valor de uso y de cambio decisivo, es parte total de su vida.
No acostumbro contestar las críticas pero quien sostiene que la palabra no tiene riesgos vive en otro planeta. En el mío Walsh pagó con su vida la militancia y no le perdonaron la Carta a los militares. Y eran palabras. Recuerdo el fin del editor del Centro Editor y de tantos periodistas. Antes de escribir y justamente usar la palabra escrita hay que hacer memoria . Recomiendo , en caso de que la misma falle, un respetuoso silencio y homenaje a los que murieron por usarla. Mi respuesta va en nombre de los que ya no pueden responder- Un abrazo enorme-
ResponderEliminarMartha Goldin
Releyendo los poemas de Martha, encuentro comentarios diversos y es cierto que hay palabras peligrosas y hay palabras de otro tipo según las intenciones del autor, por lo mismo "no siempre son peligrosas las palabras", como sugiere Andrea Casas.
ResponderEliminarFelicito a la autora,
Pablo